En su vivienda del sector Barros Arana de Temuco, mientras rezaba junto a toda su familia fue detenido ayer, Domingo Javier Cofré Ferrada (44), quien es sindicado por la PDI y la Fiscalía como el autor material del crimen de la psicóloga Erica Faith Hagan (22), ocurrido el pasado viernes 5 de septiembre en el Colegio Bautista.

Su detención se produjo cerca de las 21 horas, bajo los cargos de homicidio calificado e incendio. Esto, luego de que el arma homicida (un atizador de fierro para el fuego) fuera enviada al laboratorio de criminalística de la PDI de Puerto Montt, donde se estableció mediante pruebas científicas que habían restos de ADN que lo sitúan en el departamento de la ciudadana estadounidense.

Al respecto el fiscal regional, Cristian Paredes, sostuvo que las pruebas 'arrojan irrefutablemente la presencia de ADN de quien en el momento de los hechos se desempeñaba como guardia del establecimiento'.

Además de eso, en los zapatos del imputado la policía encontró restos de sangre, cenizas y hollín, que fueron enviados a Puerto Montt para ser analizados. Los datos que concuerdan con lo acontecido la noche del crimen, ya que el autor del homicidio intentó prender fuego a la dependencia ubicada en el edificio Cornelia Brower del Colegio Bautista, para no dejar rastro del crimen.

Los resultados de todas esas pericias llegaron durante la tarde de ayer y de inmediato el fiscal del caso y líder de la Fiscalía de Alta Complejidad, Miguel Ángel Velásquez, instruyó a la PDI para ir tras los pasos del detenido, tras obtener una orden de detención de la jueza de Garantía, Alejandra García Bocaz.

Fue así como los efectivos de la Brigada de Homicidios fueron primero hasta las dependencias del Colegio Bautista (Av. Caupolicán 71), donde revisaron el casillero de Cofré, quien no estaba en el recinto.

Tras constatar más antecedentes, se dirigieron hasta su vivienda, donde finalmente fue detenido.

Ahora la investigación debe dilucidar el móvil del crimen, el que aún no ha sido explicado por el detenido, quien hizo uso de su derecho a guardar silencio.

Según precisó el subprefecto de la PDI, Hernán Solís, Cofré Ferrada declaró en dos oportunidades en el cuartel Bilbao (una como testigo y la segunda para ver rasgos psicopáticos).

Hasta el cierre de esta edición, el rondín aún no había reconocido los hechos. En tanto hasta el cuartel Bilbao, donde permanecerá detenido hasta hoy por la mañana, llegó el defensor penal público, Iván Espinoza, quien será el encargado de representarlo hoy en el control de detención que se realizará en el Juzgado de Garantía de Temuco a contar de las 10 de la mañana.

Según informó en exclusiva El Austral en su edición del 8 de septiembre, Domingo Cofré, hizo el turno ese viernes desde las 16 horas hasta las 00.00 horas, y escribió en la bitácora de novedades del Colegio Bautista haber visto salir mucho humo del inmueble y que al acercarse al departamento para ver lo que ocurría, una persona le había señalado desde el interior del inmueble 'estoy con mi polola, pero ya me voy'.

Esos hechos fueron redactados en el libro de novedades por Cofré, a las 22.30 horas de ese viernes, y fue una pista clave para que la PDI dilucidara el caso, ya que se cree, fue una coartada para despistar a los investigadores.

Según se agregó en estas mismas páginas, Cofré llegó al puesto de rondín del Colegio Bautista hace sólo dos meses, y por su labor, era una de las personas que tenía acceso a las llaves de las dependencias.

Este dato fue también cotejado por la Brigada de Homicidios de la PDI, que tras entrevistar a todos los rondines del recinto, fue achicando el cerco de sospechosos.

Aún no se ha logrado establecer el móvil del homicidio en contra de la psicóloga, ya que se descartó el robo y un ataque sexual.

La autopsia determinó que Erica Faith Hagan no había sido violada por su victimario, pero sí fue fuertemente golpeada en su cabeza con un elemento sólido.

Según pudo conocer este medio, los golpes recibidos por la joven en su cráneo que impactaron en sus zonas parietal, frontal y occipital, fueron con tal grado de violencia, que se cree, le causaron un deceso casi instantáneo.

La búsqueda de la norteamericana se produjo el sábado 6 de septiembre luego de intensos llamados de sus más cercanos en Temuco, más concretamente de la profesora de inglés del Colegio Bautista, Marta Muñoz, con quien había quedado de reunirse.

De hecho, ayer se supo que el hijo de Muñoz, Esteban Gutiérrez, amigo de la psicóloga, con quien se habría conocido en el Georgetown College, habría acordado con la psicóloga asistir a un gimnasio durante la mañana del sábado 6 de septiembre, hecho que no se concretó porque la oriunda del estado de Kentucky no respondió ninguno de sus dos celulares.

Eso motivó que se iniciara una búsqueda, la que dio resultados cerca de las 13 horas del sábado, cuando llegaron hasta su departamento, desde el cual salía mucha agua hacia el exterior.

Para ingresar al inmueble, el guardia de ese día debió romper un ventanal para abrir la puerta. Fue en ese momento en que el marido de Marta Muñoz ingresó al departamento y vio el cuerpo sin vida de Erica, boca abajo, flotando en el agua de su tina.

Además se pudo observar que en el living yacían restos de ropas de la pasante, con claros indicios de haber sido quemadas, además de su celular personal, un iPod y un computador Mac.

Erica Faith Hagan (22), llegó por segunda vez a Temuco el pasado 28 de julio, para sumarse al Departamento de Inglés del Colegio Bautista.

En primera instancia había estado durante 20 días como alumna de intercambio, pero este año había vuelto por seis meses tras una oferta laboral.

Quienes la conocieron, la tildaron como una joven callada y muy reservada. De hecho, nunca salía sola a comprar, por temor a que le robaran o la engañaran con el dinero. Además de eso, su español 'era demasiado básico', dijo un amigo que mantuvo su nombre en reserva.

El día martes sus padres llegaron a Temuco para retirar el cuerpo e informarse de los detalles de la investigación. Al respecto, el fiscal regional, Cristian Paredes, precisó que los restos aún no serán entregados 'porque la investigación sigue abierta y pueden quedar pericias'.

Dos

'(Las pruebas) arrojan irrefutablemente la presencia de ADN de quien en ese momento se desempeñaba como guardia del establecimiento'.