A pesar de que el alza en el precio de la papa, un alimento esencial en la mesa chilena, se ha sentido fuerte en el bolsillo de los usuarios -llegando a fines de octubre a un promedio de $800 el kilo en la feria, según la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias, Odepa (ver recuadro)- los productores y comerciantes proyectan una disminución paulatina del valor, que llegaría a su precio más conveniente en las fiestas de fin de año, Navidad y Año Nuevo.
Así lo aseguró Juan Quilaqueo, presidente de la empresa comercializadora Tranapuente, quien señaló que en las próximas semanas "aumentará el número de productores que ofrecerá la papa nueva (propia de la estación), lo que provocará una disminución del precio".
Alzas
Pese a que es normal que a partir de octubre sea la papa nueva la que prime en el mercado, reemplazando a la papa vieja, Quilaqueo advierte que el aumento del precio del tubérculo se debe a la prematura desaparición de esta última variedad, en relación a otro años.
"El año pasado, en este tiempo, había abundancia de la papa vieja, por lo tanto la nueva no alcanzó los precios que tiene hoy día. Ahora hay una escasez de papas viejas, por la extensión de las lluvias en el año, y eso ha afectado el precio", agregó.
Quienes han sentido directamente los efectos de este incremento en el valor son los comerciantes de la Feria Pinto, de Temuco. Una de ellas es María Durán, quien junto con ofrecer el kilo a $1.000, aseguró que "el precio de la papa ha subido bastante en relación a otros años, porque afectó el tiempo y las heladas".
La comerciante, además, señaló que la clientela no sólo ha manifestado su descontento respecto al precio, sino que también ha modificado su compra.
"La gente se queja y ha comenzado a llevar sólo un kilo, no más que eso. Entonces, para nosotros se ha puesto 'lenta la cosa', porque han bajado las ventas", indicó.
Para Lidia Caro, la situación también ha sido compleja. "La papa nueva llegó más cara que el año pasado. Al principio se vendió por novedad, pero ahora ha estado 'lento'", agregó la vendedora.
Esto es confirmado por Margarita Parra, cliente habitual de la Feria Pinto, quien afirma que "las papas están muy caras. Hoy no están asequibles al presupuesto (...). Esto ha hecho que compre menos de la cantidad normal, así que espero que bajen pronto".
Tranquilidad
Pese al perjuicio en las ventas que han sentido las comerciantes de la Feria Pinto, ambas aseguran que los precios deberían disminuir a medida que pasen las semanas.
Más optimista es Fredy Manquelaf (que en estos días ha comprado a $35 mil el saco de papas y lo ha vendido a $800 el kilo), quien incluso hizo un llamado a la calma.
"En unos 15 días más el costo de la papa debería comenzar a normalizarse, porque va a salir más. Así que yo llamaría a la tranquilidad a todos los clientes, porque pronto van a poder consumir 'papitas' a mejor precio".
En esto los vendedores coinciden con la proyección del presidente de Tranapuente, quien sostuvo que el valor de los 50 kilos podría incluso bajar de los $36 mil (que cuestan actualmente) a alrededor de los $15 mil, a partir de la segunda quincena de diciembre. "Aproximadamente en un mes más deberíamos estar llegando a estos precios", añadió.
Cabe destacar que el precio de este producto bordea los $1.500 en los supermercados, según datos de la Odepa correspondientes a octubre.
$800 a $1000 es el precio del kilo de la papa nueva en la Feria Pinto. Los semillones, variedad más pequeña, mantienen un precio menor.