Liceo Gabriela Mistral atesora los recuerdos de la poetisa
VALIOSO. Muebles, fotos, escritos, guarda el "Rincón Patrimonio Mistraliano", distribuido en dos salas del actual edificio de calle Antonio Varas, en Temuco.
Entre 1920 y 1921, la entonces directora del Liceo de Niñas Temuco, Lucila Godoy Alcayaga, conoció al joven Neftalí Reyes. Ambos llegarían años más tarde a lo más alto de las letras del mundo al obtener los únicos Premios Nobel que ostenta el país, pero fue en la capital regional donde establecieron una amistosa relación en torno a los libros, incluso la joven maestra le habría construido un plan de lectura al pequeño poeta.
Cuenta la historia que Gabriela Mistral le pasaba los libros a Pablo Neruda en una transacción que se realizaba en el portal del liceo, ya que siendo éste de niñas, estaba prohibida la entrada a los muchachos. A casi 100 años del histórico momento, hoy el establecimiento sigue ocupando el mismo lugar, en pleno centro de Temuco, entre las calles Antonio Varas y Bello, claro que con un nombre de Liceo Gabriela Mistral.
"Lucila Godoy llegó como docente de educación general básica y directora en 1920-21, al entonces Liceo de Niñas de Temuco", indica Gabriel Luza, director del Liceo Gabriela Mistral, quien agrega que "en este mismo portal, Neruda le habría pasado el borrador de sus "20 poemas de amor", y una vez que los leyó, Gabriela le habría señalado que iba a ser un gran escritor", afirma Luza.
MEMORIA
El hecho de que un liceo temuquense haya tenido a una Premio Nobel de directora, sin duda que es motivo de orgullo para toda la comunidad educativa. Es así que el establecimiento hoy preserva la memoria de Lucila Godoy Alcayaga con una sala donde se reúnen sus muebles, fotografías y pedazos de historia de la década del 20.
Ya en la entrada principal, un busto de la poetisa recibe al visitante, en tanto que el patio interior ha sido preservado al paso del tiempo, guardando las mismas características que muestran las fotografías en blanco y negro de inicios de siglo.
"Quisimos conservar el patio como estaba originalmente, y donde las fotos muestran que entonces la calle Bello no existía, era un potrero,", dice Gabriel Luza.
Dos salas conservan el patrimonio de Gabriela Mistral. En una de ellas se encuentran valiosas fotografías de la década del 20, entre ellas una donde la Premio Nobel aparece junto a sus estudiantes.
"Rincón Patrimonio Mistraliano" es el nombre de la segunda sala, un pequeño museo inaugurado en agosto de 2005. Allí están los muebles que habrían estado en la oficina de Lucila Godoy durante su estancia en Temuco; libros de la biblioteca antigua, y en un lugar especial, una cúpula de vidrio preserva el libro de clases de la época, escrito de puño y letra de Gabriela y con su firma al pie del documento.
También está el estandarte del Liceo de 1920, algo de vajilla y del mobiliario de la época.
MURAL
Otro patrimonio importante es el de la pintora Celia Leyton, quien también fuera profesora del liceo y donde destaca el mural denominado "Profesor Neculman", elaborado desde 1953 a 1956 y que recuerda un momento histórico en La Araucanía como fue la labor del primer profesor mapuche titulado.
Esta obra será restaurada próximamente por el Consejo Regional de la Cultura.
HISTÓRICO
Todo el tesoro patrimonial del Liceo Gabriela Mistral está a disposición del público, si bien no se cuenta con una organización similar a la de un museo. La idea es a futuro transformar este mágico lugar en un punto turístico, conformando parte de alguna ruta similar a la de las Huellas de Pablo Neruda.
"El hecho que dos Premios Nobel de literatura se encuentren en un mismo lugar es una afortunada coincidencia que nosotros atesoramos como liceo y que hemos querido transmitir a toda la ciudad", sostiene el director del liceo, cuyos 540 estudiantes tienen la posibilidad única de ver las huellas de Gabriela Mistral en su edificio.