Cecilia Paiva

Desde el lunes que las precipitaciones no cesan en la zona lacustre de La Araucanía. Y fue precisamente ayer el día en que la lluvia se dejó sentir con mayor intensidad en Villarrica y Licán Ray, dos de los destinos preferidos en la Región.

Sin embargo, los chubascos que cayeron en la comuna lejos de ser una molestia, para los turistas fue toda una novedad, pues muchos de ellos "escaparon" de las altas temperaturas que aún se sienten en distintos puntos del país.

Paseos por el lago Calafquén, un almuerzo en el Centro Cultural Mapuche, una tarde de baños termales y recorridos por las decenas de galerías artesanales con que cuenta Villarrica fueron sólo parte de lo que muchos eligieron como panorama para este lluvioso miércoles.

Según cifras de la Oficina Municipal de Turismo, la localidad de Licán Ray, perteneciente a la comuna de Villarrica, la primera quincena de enero arrojó sólo números positivos. En comparación con la misma fecha del año anterior, este 2014 la afluencia de turistas creció en un 40%.

Situación que también perciben muchos comerciantes del sector, quienes han visto cómo cada vez más personas llegan a disfrutar del balneario.

César Zagal, concesionario de 100 metros de la Playa Grande de Licán Ray, afirma que "la primera quincena estuvo bien productiva para todos los comerciantes. Ahora hay un recambio de gente y ha llegado una muy buena calidad de turistas".

Provenientes de diversas ciudades de Chile, ayer muchas personas eligieron mojarse un poco e ir a la Playa Grande de Licán Ray. ¿Bañarse? Definitivamente no. El propósito de los visitantes era salir de la rutina y recorrer el lago Calafquén a bordo de un catamarán, en un paseo distinto a los habituales, donde el sol es el protagonista.

A diferencia de un día normal en que una embarcación se completa en media hora, al mediodía de ayer la subida de pasajeros fue un poco lenta, pero el catamarán "Yire" logró reunir a casi 30 personas.

Samuel Espinoza, encargado de la embarcación, señaló que la lluvia no es impedimento para zarpar y que ya contando con 15 personas a bordo se puede realizar el tour.

A ello agregó que por 3 mil pesos los adultos y $2.500 los niños "recorremos la Playa Grande, Arco de Piedra, parte de la zona de camping y parte de la península. El paseo dura alrededor de 45 minutos".

A minutos de salir a recorrer el Calafquén y con una intensa lluvia como compañera de viaje, los turistas se mostraron felices por salir de la rutina y recorrer el lago de una manera diferente.

Matías Tirado, proveniente de La Serena, contó que desde el martes está veraneando en Lican Ray junto a su familia y que pese a que el viaje en catamarán ya lo ha hecho antes, la lluvia le dio un toque distinto. "Esta es la segunda vez que hago este paseo, pero la primera en que está lloviendo. Me parece bonito. Aunque el día no está muy bueno, en la tarde vamos a aprovechar de salir con mi familia", señaló el joven.

Por su parte, Genoveva San Martín, también llegó a la zona para disfrutar de las bondades de la comuna de Villarrica. "Llegué hoy (ayer) como a las 10.30 horas y nos vamos en la tarde. Nos invitaron, así que con lluvia y todo haremos el paseo", afirmó la señora que llegó desde la comuna de Freire.

Pese a que ayer el clima lo impidió, la Playa Grande de Licán Ray también cuenta con atractivos que se suman a sus 600 metros de zona apta para baño. Por ejemplo, los kayak, paseos en yate, bicicletas acuáticas y la sensación del verano: el WaterBall.

"Este es un deporte como cualquier otro y consiste en que las personas logren mantenerse de pie dentro de esta pelota inflable y corran dentro de ella. En ese sentido, en nuestro sector de playa tenemos seis metros para que los niños o sus padres puedan jugar", relata Alejandra Aedo, quien con su pareja se dedica a arrendar las requeridas pelotas acuáticas.

A ello, añade que "pueden usarla niños desde los cuatro años hasta adultos de 40 años, si es que no tienen ningún problema cardiaco o es hipertenso. En días calurosos se puede estar cinco minutos, máximo 10. La tarifa es de 5 minutos por mil pesos y diez minutos por dos mil. Puede ingresar un adulto con un niño, con un peso máximo total de 100 kilos. El cobro es por cada persona que ingresa", concluye Alejandra.

Aunque no pertenecen a Región de La Araucanía, la tarde de ayer muchas personas que veraneaban en Licán Ray decidieron pasar la tarde en las Termas de Coñaripe, ubicadas a unos 30 kilómetros.

Rodrigo Cornejo, santiaguino, fue uno de los tantos turistas que decidió pasar una tarde en aguas temperadas. "Llevo doce días en Licán Ray. Ayer (martes) estuve en Villarrica y ahora quisimos venir a pasar la tarde a las termas por la lluvia", señaló.

Manuel Arriaza, también de Santiago, fue otro de los turistas que aprovechó la cercanía de Licán Ray con Coñaripe para así disfrutar de una tarde en las termas.

"Llegué el sábado a Licán Ray y me quedaré hasta el 3 de febrero. Ando con mi señora, hijo y hermanos. Somos como doce en total y ahora estamos acá en las termas por la lluvia. Mañana queremos seguir recorriendo la zona", comentó.

Luis Rojas, encargado de las Termas de Coñaripe, comentó sobre el aumento de turistas que "son muchos los clientes que vienen desde Villarrica y Licán Ray, y también tenemos muchos que vienen desde Pucón. Yo diría que el 80% de nuestros visitantes llegan desde la zona lacustre de La Araucanía".

Para quienes permanecen en Villarrica, uno de los panoramas más interesantes es visitar el Centro Cultural Mapuche, que cuenta con una variada oferta de productos y servicios y se ubica en pleno centro de la ciudad, específicamente en Avenida Pedro de Valdivia con Julio Zegers.

"Me encantó. Yo vivo en Antofagasta y es primera vez que vengo a Villarrica. No conozco mucho de la cultura mapuche así que aquí estoy aprendiendo bastante. Es muy recomendable venir a este centro cultural", comentó Luisa Soto, quien lleva sólo tres días en la comuna lacustre.

Héctor Marín, presidente de la agrupación WentecheMapu, señaló que "esta última semana se ha notado más público y sabemos que en Licán Ray también ha llegado bastante. La lluvia de estos días nos ha favorecido porque la gente busca lugares techados para pasear y comer. Además como ha hecho un poco de frío, también están comprando gorritos y bufandas".

Sobre lo que se puede encontrar en el recinto mapuche, Marín concluye que "hay 31 locales y tenemos para ofrecer hierbas medicinales, lana, trabajos en madera y fibras naturales, gastronomía, una ruka, plantas, aceites esenciales, quesos, mermeladas y guías para paseos por la zona, entre otras cosas".

El horario de atención es todos los días entre las 10.30 a las 23.30 horas, aproximadamente.

Si hay algo que identifica a Villarrica, además del lago y el volcán, es la artesanía en madera, destacándose entre los productos que se hacen con ésta los muebles, figuras de animales, juguetes y artículos de cocinería, por mencionar sólo algunos.

Como en las principales arterias de la ciudad es posible encontrar puestos y ferias artesanales, definitivamente éste es un panorama imperdible para quienes visitan la zona.

Producto de la lluvia, por ejemplo, la feria HuimnPay de calle Julio Zegers 570 fue una de las más visitadas la tarde de ayer.

Matías Cabezas fue uno de los turistas que aprovechó las precipitaciones para recorrer el recinto. "Con mi familia llevamos como cuatro días en Villarrica. Antes de ayer fuimos a las termas y ahora estamos recorriendo las galerías artesanales de acá. La lluvia no me molesta, al contrario, me parece relajante", contó el joven proveniente de Santiago.

Por su parte, Ivan Montero, artesano del local N°9, señaló que "unos pocos días de lluvia nos favorecen harto, porque a la gente le gustan los lugares techados. Además, cada año se ve que viene más gente a Villarrica".

Aunque producto de la lluvia ayer la Costanera no brilló como siempre, el lugar ofrece una variada gama de actividades orientadas a la familia. Por ejemplo, los paseos en autitos individuales.

"El paseo cuesta 2 mil pesos la media hora y mil los 15 minutos, con ellos la persona puede andar todo lo que quiera", cuenta Marcelo Sanhueza, dueño de diez tradicionales autitos que circulan por la ciclovía de la Costanera.

A sólo algunos metros de este sector se ubica el embarcadero, emblemático sector de Villarrica en donde se pueden contratar distintos servicios, como los paseos en catamarán, bicicleta acuática, botes y kayak.

"El paseo en camatarán cuesta $3.000 para adultos y $1.500 para niños. El paseo dura una hora aproximadamente y el recorrido consiste en todo lo que es naturaleza: mostramos el nacimiento del Río Toltén, pasando por Playa Blanca y Puerta del Sol, hasta llegar a los jardines de Villarrica. A parte de eso, el guía va dando información a los pasajeros y les va contando la historia de nuestra ciudad", cuenta Julia Aedo, una de las emprendedoras del Yachting.

Sobre los otros paseos que ofrece, agrega que "el paseo en bicicleta cuesta $1.500 por persona la media hora. El arriendo de botes tiene un valor de 3 mil pesos y que pueden subir hasta cuatro personas, todo en un tiempo de media hora para recorrer", concluye.

Por su parte, Mauricio Bustos, de la empresa Kayak Villarica, cuenta que "el precio es de $1.500 por persona, tenemos kayac individuales y dobles. Todos van con su chaleco salvavidas y son aptos para personas sin previa experiencia. Cada kayac tiene derecho a estar media hora en el lago".

Los paseos y arriendos de embarcaciones en Villarrica están todos los días del verano entre las 10:00 y las 20:00 horas, aproximadamente.