Corría el minuto 91 de juego, en el Estadio Arena Pantanal de Cuiabá y Jean André Emanuel Beausejour Coliqueo recibió la pelota en el límite del área y un certero zurdazo logró darle el definitivo 3 a 1 de Chile sobre Australia, desatando el grito de gol en todo el país.

Ese mismo grito del gol se escuchó en el fundo Huilío, en las afueras de Freire, en donde viven tíos y sobrinos del crack de la 'Roja', que es hijo de una mujer mapuche y un hombre haitiano, y que el viernes se convirtió en el primer jugador chileno en marcar en dos citas planetarias de manera consecutiva, tras anotarle a Honduras en el mundial de Sudáfrica 2010 y gritar gol ante los oceánicos en tierras brasileñas.

El Austral viajó hasta las tierras de los Coliqueo para saber cómo vivieron el partido en donde uno de los suyos ayudó a que Chile comenzara con el pie derecho su sueño mundial en la tierra de los pentacampeones del mundo.

Juan Coliqueo es hermano de la madre del actual jugador del Wigan Atletic de la Premier League inglesa y junto a su familia disfrutó de manera bastante especial la actuación del conjunto nacional, sobre todo por lo que mostró su sobrino.

Coliqueo conoce al formado en la Universidad Católica desde pequeño, claro que ahora acota con algo de tristeza que 'hace rato que no viene' dice su tío.

Coliqueo recuerda con alguna dificultad cuando Jean era sólo un niño y corría junto a una pelota por los pastos del fundo enclavado en el sector Peleco de la zona costera de la Región.

'Cuando era chico él jugaba acá a la pelota, era bueno, siempre supimos que era un buen jugador', señala el familiar del jugador que el pasado viernes entró en la historia del fútbol chileno al anotar en dos mundiales de forma consecutiva.

El viernes a la hora del cotejo, Coliqueo recuerda que se juntaron con la familia a ver el duelo contra los australianos y si bien dice que no le molestó que su sobrino no ingresara como titular, lo importante dice, 'es que hizo el gol que agrandó la diferencia'.

El tío del apodado 'Palmatoria' reconoce que por culpa de su avanzada edad, 85 años, ha sufrido una serie de problemas en uno de sus ojos. 'Veo poco ahora, pero igual pude ver cuando entró Jean y cuando hizo ese lindo gol, gritamos harto acá el gol', recuerda.

Sobre lo que puede pasar en los próximos partidos, su tío lo único que pide es que 'el equipo y él (Beausejour) tengan un buen desempeño porque hasta ahora lo han hecho muy bien', resalta.

A unos kilómetros de distancia de don Juan, vive Nora Coliqueo Millaleo, quien también es tía de Jean Beausejour.

Dice que la última vez que visitó sus tierras fue hace tres años, tras integrar el plantel que viajó al Mundial de Sudáfrica.

Lo describe como 'un muchacho simple, querendón, muy educado y que es muy capaz en lo que hace. Siempre pensamos que jugaría a la pelota porque era muy bueno', recuerda su familiar.

Su tía Nora tiene razones de peso para estar atenta a lo que hace su sobrino. Sus dos hijos han intentado dedicarse al fútbol de la misma forma que lo hace el zurdo, claro que hasta ahora sin mucho éxito, aunque no pierde la fe de que sus retoños puedan lograr algo similar a lo del actual '15' de la 'Roja'.

En la familia Coliqueo el entusiasmo está a tope. El próximo miércoles, a las 15 horas, Chile enfrentará a España en el mítico Maracaná de Río de Janeiro, y esperan que su sobrino vuelva a generar el grito de gol en millones de gargantas nacionales y regionales.

'Ahora viene España, son los campeones. Ojalá Jean pueda jugar y hacer otro gol, sería lindo', señala un aún emocionado Juan Coliqueo.

La tía Nora, por su parte, dice que espera que su sobrino haga otro buen partido y pueda volver a inscribirse en las redes de este mundial, para así llevar a Chile a su segundo triunfo en Brasil.

'Ojalá ahora le pueda hacer un gol a España. Sería algo más grande todavía porque ellos son los campeones. Ojalá se dé y nuestro sobrino anoté otro gol porque aquí celebramos harto', afirma Nora Coliqueo.

Su gol al portero oceánico Mathew Ryan en los descuentos del partido que cerró la primera fecha del Grupo B del Mundial, ubicó a Jean André Emanuel Beausejour Coliqueo en un sitial único del fútbol criollo.

Esto porque ese tanto fue el segundo de manera consecutiva que anota un jugador de la selección en dos mundiales de fútbol, hecho que nunca había podido alcanzarse.

Su primera conquista mundialera la marcó el 16 de junio del 2010, en el Estadio Mbombela de Nelspruit en Sudáfrica, cuando tras un centro de Alexis Sánchez, el jugador con raíces mapuches logró tocar el balón a la entrada del área chica y provocar el primer grito de gol en ese campeonato luego de ocho años de ausencia en el evento por excelencia del fútbol mundial. En esa oportunidad le anotó a Honduras, en duelo válido por la primera fecha del torneo.

Es más, en ese partido la FIFA reconoció a Beausejour Coliqueo como el mejor jugador del partido, en la selección que por ese entonces era dirigida por el trasandino Marcelo Bielsa, y que llegó hasta octavos de final tras caer ante Brasil.

Ese dato lo reciben sus familiares con algo de extrañeza, pero dicen que 'si muestra lo que él ha hecho, todo el sacrificio que ha tenido que hacer esta bien que entre en la historia del fútbol nacional', afirma su tía Nora Coliqueo Millaleo.

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