Carpintero cumple siete meses sin dar señales de vida en la comuna de Cunco
perdido. Carta anónima dejada en Carabineros dice que murió tras ser atacado por perros.
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Más allá del significado religioso de la Navidad, esta fecha simboliza también la unión y el reencuentro de muchas familias. Esa sensación es la que anhela el clan Navarrete-Abarzúa, que desde el pasado 11 de mayo sufre por la extraña desaparición de Aníbal Navarrete Esparza (88).
El adulto mayor, que padece una leve demencia, salió esa jornada de domingo rumbo a la iglesia donde supuestamente se encontraría con su esposa, Benigna Abarzúa (76), a quien sagradamente le guardaba un puesto para escuchar las palabras del párroco. Lamentablemente para su esposa e hijos eso nunca ocurrió, perdiéndose todo rastro del otrora carpintero.
Desde ese día han pasado ya más de siete meses. "No hay noche que no me duerma pensando en él, ni día en que me levante con el mismo pensamiento", dijo Sandra Navarrete, una de las siete hijas de don Aníbal.
La mujer, que actualmente vive en Temuco, afirmó estar aún esperanzada en que su padre pueda aparecer. "El no estaba mal, estaba ágil, todos los días salía a caminar por la plaza, el hospital y el supermercado. No sé dónde está pero espero que vuelva pronto".
Su preocupación además radica en el deterioro de salud de la esposa de Navarrete. Según su hija "mi mamá está empeorando día a día un poco más, esto ha sido muy desgastante", precisó.
anónimo
Hasta la Tenencia de Carabineros de Cunco llegó hace unos mes un papel, escrito por un anónimo, el que fue dejado en una de las ventanas del lugar y en su interior había información sobre el paradero del ex carpintero.
El recibimiento del escrito fue confirmado por el suboficial mayor Edmundo Paredes, quien precisó que apenas conocieron el contenido del papel, lo entregaron a la Fiscalía para que lo anexara a la carpeta investigativa.
El texto dice concretamente que "el abuelito que anda extraviado hace ya más de 2 meses, de apellido Navarrete, según lo que se comenta en la población Santa Adela, pasaba por calle Llaima frente al molino viejo, de propiedad de la familia Hetich, ingresó al patio del molino y lo habrían atacado unos perros y este caballero habría muerto".
Sandra Navarrete, hija del desaparecido, si bien espera que la parte trágica de la historia no sea cierta, sí le da validez al hecho que su padre pudo haber transitado por ese lugar.
"El años atrás trabajó en ese molino, conocía el sector, entonces puede ser cierto que estuvo allí", dijo su primogénita.
Por su parte, para la Fiscalía, esta pista aún está en etapa de pericia, ya que el papel fue escrito en un equipo computacional y por ende, fue enviado a un laboratorio más especializado para tratar de buscar alguna huella que pueda dar algún indicio de quién fue la persona que dejó la carta en la ventana de la Tenencia de Cunco.
"Se puso en conocimiento de la Brigada de Homicidios para que indagara esta nueva línea investigativa. Ahora, existe una diligencia pendiente en el Laboratorio de Investigaciones de Carabineros, que dice relación con un informe huellográfico, para levantar alguna y determinar la procedencia de la misma", señaló el fiscal Alberto Chiffelle.
Sobre la posibilidad de que Navarrete Esparza haya sido atacado por perros en el sitio, el persecutor jefe de Temuco afirmó que de momento esa teoría estaría siendo descartada, tras la visita de los policías al lugar.
"Hay un preinforme de la policía en donde se identifica un sector en donde existen alrededor de nueve canes, los que en general no son agresivos y se mantienen encerrados por lo que, esa línea por ahora se estaría descartando", aseveró el persecutor.
investigación
El fiscal fue tajante a la hora de señalar que la causa "sigue vigente", agregando que la Brigada de Homicidios de la PDI continúa trabajando en la búsqueda del ex carpintero extraviado en Cunco el pasado 11 de mayo.
Chiffelle agregó que en la investigación se han usado canes de Santiago y equipos multidisciplinarios pero que por ahora, no han dado buenos resultados.
La familia, ante esto, solo le pide a la persona que dejó el anónimo que se comunique con ellos "y nos diga lo que sabe a nosotros, ya no damos más", sentenció Navarrete.