Calle Bulnes y el nuevo ciclo político 2015
Nunca habíamos sido testigos de la cantidad de marchas por calle Bulnes en estos últimos 100 días del 2014 en una ciudad marcada por la apatía e indiferencia. Marchas de diversas organizaciones y con las más amplias demandas. De la misma forma hemos sido testigos del nivel de descomposición de la política, la baja calidad del debate público, el alto calibre de los calificativos y la desconexión del parlamento con el tejido social, con el Chile profundo, entre otros síntomas.
Una de las principales reformas es hacia la propia política para una mejor democracia, fin a las barreras de entrada, a las dictaduras internas y al bloqueo de las reformas que buscan combatir la desigualdad. Otra reforma importante es con nosotros mismos, no sacamos nada con educación de calidad si los médicos no regresan al sistema público no sacamos nada si seguimos con el paradigma del éxito, el hedonismo, explotando la naturaleza, negando la diversidad y la existencia del otro.
En este contexto, será una vez más el movimiento social el que pondrá la agenda pública sobre la mesa, los dos bloques que gozan del binominal ya no lo hicieron y no lo harán porque son parte del negocio político-económico, calle Bulnes lo demostró este 2014 y todo indica que los proyectos personales, sumados a la fragmentación de la derecha y las tensiones entre la Nueva Mayoría y la vieja Concertación, serán el gran obstáculo para encauzar el camino reformista con sus proyectos de ley.
El Gobierno de Bachelet debe dejar ripiado el camino que necesitamos hacia una nueva Constitución nacida en democracia vía Asamblea Constituyente y sea este hito histórico el que entierre por fin la transición para dar paso a ese nuevo Chile que estamos esperando.
Súmate a construir, a restaurar y a ocupar la política, formemos parte de este nuevo ciclo, en una Región que tanto necesita de una buena política local, hay muchas páginas en blanco por escribir y que requieren de tu fuerza en el movimiento social que ha sido excluido por la política y que se ha expresado nítidamente en calle Bulnes. Será éste descontento ciudadano, organizado y estructurado políticamente el que tendrá la oportunidad de no esconder la cabeza y abrir esta nueva etapa. Nos vemos el 2015 en calle Bulnes.
Daniel Sandoval,