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La temperatura más alta de esta temporada estival se vivió ayer en La Araucanía. Los termómetros alcanzaron una máxima de 34,9 grados en Angol y en Temuco se empinaron hasta los 34,3 grados a las 17.03 horas de ayer.

Ayer ningún lugar parecía demasiado fresco para arrancar del sol que durante la tarde se dejó sentir con más fuerza que nunca en las calles, plazas y parques de la Región.

Es así como las piscinas de Temuco se llenaron de grandes y chicos. A eso del mediodía la Piscina Municipal ya estaba a capacidad total y así se mantuvo todo el día. Y es que todos querían permanecer en el agua el máximo de tiempo posible para después descansar a la sombra de algún árbol o en el fresco pasto en compañía de alguna bebida. Según el administrador del recinto, al lugar llegaron alrededor de 600 personas.

NEGOCIO REDONDO

Algunos de los que disfrutan al máximo las altas temperaturas son los dueños de los carritos de mote con huesillo o de venta de helados y bebidas en la plaza de Armas de Temuco. Ayer, gracias a las altas temperaturas, tuvieron uno de sus mejores días de venta de productos.

Juana Curihual -o "Juanita" como es conocida por todos- es vendedora de bebestibles y helados y hace 25 años está ligada a este rubro. Las altas temperaturas de este verano han hecho que se incremente la venta de helados, agua mineral, jugos y bebidas, siendo el de ayer un gran día de ventas.

"Hoy (ayer) hace más calor que los otros días y esto trae una mayor venta", aseguró Curihual, quien recalcó que la atención debe ser siempre de lo mejor. También señaló que uno de los aspectos más importantes y que esperan los clientes es tener los productos helados, pero no congelados. "Yo los tengo heladitos con hielos. Así voy reponiendo para que se conserven en una temperatura ideal, porque es importante que no se congelen", explicó, agregando que el precios del agua mineral es de 700 pesos, y los helados de agua (piña, naranja, frutilla) , 250 pesos cada uno.

Otro de los buenos negocios de ayer fue el de la venta del mote con huesillo. Es el caso de Jonathan Andrés Cofré, quien llega todos los días a eso de las 10.30 horas para vender alrededor de 200 vasos del brebaje.

Cofré aseguró que la venta ha estado más que buena y que los precios dependen del tamaño, que van desde los 500 a los 700 pesos. "Los bidones vienen congelados, con la finalidad de mantener la temperatura", comentó.