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A cinco años de haber ocurrido uno de los terremotos más grandes que ha azotado al país, La Araucanía cuenta con un 98,3% de los subsidios de reconstrucción operativo. Si bien la Región no sufrió desmanes de máxima magnitud, se entregaron 5 mil subsidios por concepto de reconstrucción a raíz del 27/F.

Según los datos proporcionados por el Minvu, de los cinco mil subsidios de reconstrucción aún quedan pendientes 84. Dentro de esta cifra, son 61 proyectos los que están en proceso de ejecución, y los 23 restantes se pretende finiquitarlos durante 2015, dando finalmente un punto final a uno de los desastres naturales más trágicos del siglo XXI.

En tanto, desde la Onemi destacan que en estos cinco años la evolución del tema sísmico en el país ha sido alta, logrando duplicar el personal de antaño, lo que junto con políticas de prevención y el uso de nuevas tecnologías, espera lograr que ante un eventual terremoto la población cuente con los mecanismos para resguardar su seguridad y la de quienes los rodean. Sin embargo, no existe un catastro regional de la cantidad de sismógrafos instalados ni su ubicación exacta.

SUBSIDIOS

Catorce comunas de la Región actualmente están siendo intervenidas por el Minvu para entregar los subsidios restantes, los que se concentran en la comuna de Malleco (ver recuadro).

En relación a los subsidios que comenzarán a ejecutarse este 2015 -y que se espera terminar este mismo año-, éstos corresponden a las comunas de Carahue, Gorbea, Loncoche, Padre Las Casas, Temuco y Villarrica.

"Con cada obra realizada estamos avanzando como Araucanía y dejamos atrás los tristes recuerdos del terremoto; estamos, por tanto, generando instancias más cercanas para acoger a todos los afectados", indicó la seremi de Vivienda, Romina Tuma.

La autoridad hizo hincapié en que junto con reponer las viviendas afectadas, la idea de la reconstrucción es entregar inmuebles de mejor calidad que los anteriores, motivo por el cual el proceso en La Araucanía ha tardado cinco años.

"El proceso de reconstrucción es muy complejo: sin embargo, debemos comprender que reconstruir no es sólo reponer lo que ya había, sino construir mejor, con más energía, con más experiencia y mirando al futuro", acotó Tuma.

ONEMI

"En este tiempo se ha fortalecido la acción de la Onemi en regiones, lo que responde a que se ha puesto en valor la importancia de estar preparado", señaló Janet Medrano, directora regional de la Onemi, quien precisó que en este quinquenio, el personal de la institución ha aumentado casi al doble.

"Hay turnos durante las 24 horas, contamos con un equipamiento capaz de brindar un monitoreo mucho más ejecutivo y moderno. También se ha implementado una serie de protocolos a nivel nacional", detalló Medrano.

Dentro de esta evolución del tema sismográfico y las acciones a seguir ante un desastre natural, la Onemi, en conjunto con la Universidad de Chile, se encuentra trabajando en el fortalecimiento de la Red Sismológica Nacional, proyecto que contempla la instalación de sismógrafos, acelerógrafos y GPS en distintos puntos del país.

Sin embargo, a pesar que se conoce que a la fecha existen 65 sismógrafos instalados en el país, la directora de Onemi Araucanía reconoció que no existe un catastro donde se precise cuántos de estos aparatos hay en la Región. Por ende, tampoco hay un detalle de los puntos geográficos donde éstos se ubicarían.

PREVENCIÓN

Fernando Peña, coordinador del Laboratorio de Planificación Territorial de la Universidad Católica de Temuco (UCT), entidad que lleva quince años trabajando en la prevención de desastres naturales, indica que si bien ha habido avances en torno a cómo enfrentar estos fenómenos tras el 27/F, aún falta avanzar en educación, sobre todo a nivel escolar.

"Hay avances en materia de poder incorporar las áreas de peligrosidad a los instrumentos de planificación territorial, de hecho, existe un proyecto para que los planes de ordenamiento territorial tengan carácter normativo a partir del año 2017, incorporando las áreas de riesgo", explica Peña.

El profesional destaca que, a pesar de los avances, siguen habiendo brechas y temas pendientes, los que se centran en la efectividad de las vías de evacuación y las oficinas de gestión, ya que aún existen vacíos administrativos en torno a quién se hace cargo de determinados procesos. "Necesitamos mejorar las vías de evacuación, ese es un tema pendiente, ya que se debe avanzar en señalética y educación al respecto", indicó, agregando que "no tenemos oficinas de gestión municipal que aborden los procesos posteriores".

En relación a la zona costera, el académico de la UCT recalcó que las obras de mitigación son clave. "Por ejemplo, caleta La Barra es un sector que en caso de tsunami el sector más próximo de seguridad está a cinco kilómetros, por lo que se necesitan obras de mitigación en altura, como las que existen en Japón".