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"En todos los años de vida junto a la montaña, nunca había visto una desgracia como ésta", es el crudo testimonio del vecino de Melipeuco Adrián Cerna, quien a sus 71 años vio morir a sus animales de las veranadas a causa del incendio forestal que hoy arrasa con 3.500 hectáreas en dos zonas que forman parte de la Reserva de la Biosfera de las Araucarias: la Reserva Nacional China Muerta y el Parque Nacional Conguillío.

Ayer, brigadistas de Conaf, Bomberos y equipos de emergencia extremaban esfuerzos por combatir un siniestro del que no hay una proyección precisa de su duración.

"No tenemos una proyección de cuánto podría extenderse el siniestro. Acabamos de tener una reunión técnica y esa pregunta salió varias veces, pero no tenemos esa percepción, se debe ir avanzando día a día...Yo podría decir semanas, pero estos son incendios extraordinariamente complejos, de muy difícil manejo", sostuvo el director regional de Conaf, Mario Acuña, respecto del incendio forestal de China Muerta.

Las enormes dificultades que hoy experimentan los equipos de combate del incendio son ratificadas por el director (s) de la Onemi regional, Juan Cayupi, quien indicó que "no hay una proyección de cuánto podría extenderse en el tiempo este incendio, ya que el siniestro es complejo para su ataque y control...Hay troncos enormes que será muy difícil apagarlos tan fácilmente".

"Desde que comenzó el incendio los servicios públicos han trabajado en forma conjunta con el municipio de Melipeuco, labor que se ha visto intensificado desde que se decretara la alerta roja a partir del pasado 15 de marzo, en donde se ha puesto a disposición todo el capital técnico y humano para realizar el trabajo del mejor modo posible", aseveró Cayupi.

"Lamentablemente, producto de la abrupta topografía que presenta el sector y su densa vegetación, se ha dificultado extremadamente el trabajo, llegando brigadas de distintos sectores del país a colaborar para poder controlar ésta catástrofe natural".

La zona de la precordillera de Melipeuco hoy se encuentra bajo una nube de humo, y quienes viven en las cercanías de China Muerta son quienes más han sufrido con este desastre ecológico.

Adrián Cerna es lo que se entiende en la jerga de montaña como un "baqueano". Conocedor a fondo de los caminos y recovecos de los altos montes de China Muerta, asegura que nada lo podía haber preparado para este incendio forestal.

"Ayer (jueves) debimos terminar nuestra veranada trasladando rápidamente a los animales hasta el bajo, por el puente del sector Cabeza de Indio, porque el fuego se nos venía encima...Sin embargo, no fuimos lo bastante rápidos y 7 vacunos quedaron atrapados por el fuego, murieron allí, en el bosque".

El incendio forestal que lleva una semana quemando araucarias, lingues, ñirres y asolando la fauna cordillerana, tuvo el pasado jueves un vuelco al sumar a los graves daños, su ingreso al Parque Nacional Conguillío.

Las altas temperaturas, la escasez de agua y los vientos, han desperdigado las llamas por toda la zona de la Reserva Nacional China Muerta y ayer el fuego se direccionaba también hacia sectores como Loncotriuque, Los Arenales y Coyán Bajo.

"Esta es una de las emergencias más grandes que hemos debido enfrentar", asegura el jefe de Retén de Melipeuco, suboficial mayor Héctor Escobar, quien agregó que "en el sector de China Muerta, Coyán Bajo, hay viviendas en riesgo, por lo que Conaf y Bomberos han debido trabajar día y noche para que las llamas no se propaguen hasta el lugar".

Ayer, precisamente los esfuerzos se centraba en evitar la propagación del siniestro. Elevados por sobre los 200 metros de altura, brigadistas de Conaf intentaban poner obstáculos al fuego, en tanto que en la base de los montes, equipos del MOP trabajaban con maquinaria pesada, contra el tiempo y contra las condiciones climáticas.

Fundo Coyán era uno de los sectores más afectados por el siniestro. Apenas a un kilómetro del fuego, la vivienda de veraneo del empresario Rodrigo Saavedra recortaba su silueta contra el amasijo de llamas y humo de China Muerta.

"Llegué hoy (ayer) desde Santiago, y aquí estoy en mi campo, con una pena tremenda", indicó Saavedra. "Aquí nosotros cuidamos los árboles, tratamos de no cortarlos, este es un lugar precioso, con bosque virgen sin intervención, con pájaros carpinteros de cabeza roja, pumas...Es terrible ver todo en llamas".

La cabaña de veraneo de Saavedra -ex seremi de Economía de La Araucanía - está muy cerca del incendio. Hecha con cariño, exclusivamente con maderas recogidas del suelo y no cortadas de los árboles, la construcción parece condenada al fuego.

"Una vivienda se puede volver a levantar, pero lo más doloroso e irreparable es la pérdida de los árboles. Cuando se quema una araucaria, cuando se quema un par de coihues, eso no se recupera".

En el sector del incendio en Fundo Coyán, la quila -seca y verde-, los árboles de gran tamaño, los acopios de madera de antiguas empresas de la zona, formaban junto al pasto seco una mezcla combustible que hacía pasar las llamas con vertiginosa rapidez de un lado a otro. "Las araucarias se queman con una llama que supera los 10 metros", asegura Saavedra, mientras cruza un puente de troncos destinado a las veranadas y que también fue consumido en parte por el fuego.

Mientras la distancia y el humo apenas dejan ver minúsculas figuras humanas en las alturas de los montes, en la base de los mismos se multiplican los focos.

"Muchos de estos los apagamos durante la mañana, y aquí están, ardiendo de nuevo", agrega Saavedra, impresionado por la voracidad del siniestro, que segundo a segundo engulle la naturaleza virgen de la hermosa comuna de Melipeuco.

Ayer se llevó a cabo una mesa técnica sobre incendios forestales, específicamente para ver la situación de la Reserva Natural China Muerta de la comuna de Melipeuco, la cual estuvo compuesta por el gobernador provincial de Cautín; seremi de Gobierno, seremi de salud, seremi de Obras Públicas; Director (s) Regional Onemi, Carabineros, Ejército, Bomberos y Conaf.

INVESTIGACIÓN

La Fiscalía local de Temuco, por orden del fiscal jefe, Alberto Chiffelle, realiza una investigación acerca del origen del siniestro, que se abrió tras el primer parte entregado por Carabineros.

Además, el Ministerio Público solicitó a Bomberos, Carabineros y Conaf un informe detallado acerca de lo ocurrido en China Muerta, precisando que de momento no se presume intencionalidad.