Inquilino repelió a balazos ataque en predio de la familia Herdener
collipulli. Cuatro encapuchados llegaron en una camioneta al fundo Nahuel y dispararon a la casa en plena noche con intenciones que se desconocen. Él y su señora salvaron ilesos.
A las 22:30 horas del jueves se desató el episodio más difícil que le ha tocado vivir al inquilino Efraín Mora (55) en sus 35 años de trabajo. Con cuatro disparos de escopeta tuvo que responder al ataque de encapuchados armados a la casa que habita en medio del fundo Nahuel, propiedad del agricultor Herman Herdener, ubicado a 7 kilómetros de Collipulli.
El fuego cruzado no duró más de cinco minutos. Su señora se arrojó al suelo mientras él tomó su arma y comenzó a contrarrestar los disparos que abrieron los desconocidos. El primer tiro destrozó el vidrio de la pieza y reventó a un costado de un rosario y una imagen de la virgen que cuelga en la cabecera de la cama matrimonial.
"Ellos tiraron entre 5 ó 6 disparos. Yo le di como unos cuatro. Dieron vuelta toda la casa, quedaron todas las ventanas rotas. Me dispararon con un revólver también porque la casa tiene como seis metros y una bala atravesó tres murallas y en el baño cayó el proyectil", comentó el trabajador de la familia Herdener, pariente del suegro del agricultor Juan de Dios Fuentes.
La Fiscalía investiga el móvil del ataque. Por un lado, se baraja la hipótesis de la sustracción de especies y por otro, un posible incendio frustrado ya que en el predio agrícola de 180 hectáreas, a pocos metros de la casa del inquilino hay tres galpones con maquinaria, productos agrícolas y hasta un camión, además de estructura menor.
"Hasta el momento nosotros lo que tenemos es la existencia de estas personas armadas que se dirigieron hasta el lugar, que intimidaron y que causaron daños con armas de fuego. La investigación nos tendrá que aclarar el móvil, ya sea la sustracción o causar un daño mayor dentro de la propiedad. Se causaron varios daños en ventanales del inmueble, con disparos, y eso ha motivado que se adopten de aquí en adelante algunas medidas de protección", comentó el fiscal jefe de Collipulli, Héctor Leiva.
Entre las pistas que encontró la policía, aparte de los casquillos de escopeta y la bala calibre 38 que atravesó la vivienda, en el lugar apareció una boleta y una factura de compraventa de animales que podría ser propiedad de uno de los atacantes.
Insistentes bocinazos desde una camioneta que sospechosamente se encontraba a unos 300 metros de la casa de inquilinos, alertaron a Efraín. Se trataba de un vehículo 4x4 rojo que lo invitaba a acercarse. Él decidió salir hasta el antejardín. La camioneta avanzó y cuando estaba a dos metros del portón descendieron dos encapuchados armados.
"Yo los llamo y se acercan a como dos metros del portón y se bajan dos encapuchados y me apuntan con una escopeta recortada. Los dos con armas y andaban como cuatro tipos. Me di media vuelta y uno me dice: 'párate tal por cual, párate'. Yo dije: 'no por qué po'. De repente uno de los tipos salta por el portón y me sigue. Alcanzo a entrar a mi casa cuando me tiran el primer balazo por la ventana", relató Mora.
Ese fue el acto que gatilló el intercambio de balas. La víctima contó que gracias a los cuatro disparos que percuto rápidamente con su escopeta y a la ruidosa alarma de la casa, los desconocidos huyeron en la misma camioneta que los esperaba con el motor encendido.
"Aquí no hay ninguna seguridad, está todo a la buena de Dios nomás (…) me dispararon directamente. Lo que pasa es que si me hubieran disparado con el revólver que según andaban trayendo los tipos podría haber sido (herido) porque atravesó todas las murallas", comentó en la mañana de ayer la víctima.
El hecho terminó sin lesionados y de momento no se manejan antecedentes para enmarcarlo en el denominado conflicto mapuche. Eso sí, luego de los informes del Laboratorio de Criminalística de Carabineros (Labocar) la Fiscalía tomará una decisión al respecto. La carpeta investigativa fue caratulada bajo la figura de daños y amenazas.
"Estamos analizando si lo relacionamos o no con los delitos de violencia rural que han ocurrido dentro de la zona", esgrimió el fiscal Leiva.
Personal de Carabineros efectuó un amplio operativo en el sector y perició hasta las 5 de la madrugada de ayer el sitio de suceso. Hasta el cierre de esta edición no se registraron personas detenidas por este nuevo hecho de violencia en un predio de Malleco.
Avvru
Sin embargo, para la Asociación de Víctimas de la Violencia Rural (Avvru) está claro que se trata de un ilícito en el marco del conflicto y no un mero hecho delictual. Como "un golpe duro" catalogó el director ejecutivo de la Avvru, Luis Felipe Romero, el ataque a la casa de inquilinos de la familia Herdener.
"Gracias a Dios no hubo ningún herido. Nuevamente vemos que es un hecho de violencia gravísimo y vamos a pedir las medidas de protección necesarias para el predio. Entendemos que este clima de violencia no puede continuar. Tenemos una gran cercanía con Herman Herdener y para nosotros es un golpe duro, un golpe más que sufre el mundo del agro en función de un conflicto sin sentido", dijo Romero.
La Avvru, disparó sus críticas en contra de la autoridad provincial, la gobernadora Andrea Parra. "La gobernadora en este tema está absolutamente al debe. Creo que hace mucho rato que este tema simplemente la sobrepasó. Veo a una persona absolutamente sobrepasada, sin ideas de cómo frenar el conflicto en su provincia y creo que en ese sentido tiene que hacerse alguna acción por parte tanto del intendente como del Gobierno central para que efectivamente esto termine", afirmó el abogado.
Se intentó obtener una versión de la gobernadora Parra, sin éxito. Quien sí habló y repudió el hecho, fue el seremi de Gobierno, Mario González. "No amparamos acciones violentistas de ningún tipo, las rechazamos con todas las fuerzas. Esperamos que puedan ser descubiertos estos delincuentes y que todo el peso de la ley caiga sobre ellos", dijo y sobre los dichos de la Avvru, llamó a la calma: "Hay que ser rigurosos a la hora de emitir opiniones tan ligeras", replicó la autoridad regional.
Violencia
El ataque en el fundo Nahuel es el tercer hecho delictivo en menos de una semana, en la denominada "zona roja". El viernes 27 de junio, encapuchados desvalijaron y quemaron 3 viviendas, robaron armas y dinero en efectivo a la familia Navarrete Navarrete, en Ercilla. El lunes 29 del mismo mes, desconocidos robaron 80 cabezas de ganado desde el fundo Santa Rosa en Victoria y secuestraron a dos inquilinos, los que aparecieron 5 horas más tarde en un camino rural.