"Esta generación está convencida de que puede ser campeona del mundo"
CLASIFICATORIAS. Eugenio Mena y Mark González asomarían como titulares.
Pese a que se encontraba en el Estadio Nacional transmitiendo para la radio ADN y luego debió acudir raudo a Chilevisión, el periodista Cristián Arcos vivió la final de la Copa América como un hincha más. "Nunca pensé que Chile iba a ganar. Cuando Chile gana la Copa América para mí fue como cerrar un círculo", manifiesta el autor de libros como "Minuto 119" y "Simplemente Gary".
En "Los 23" (Planeta), Arcos cuenta los detalles detrás de la epopeya del inolvidable 4 de julio. En esta entrevista analiza el presente de la selección nacional y las inquietudes sobre la nueva generación de jugadores, a propósito del camino previo al Mundial de Rusia 2018.
- En cuanto a la transición del fracaso a este instante de triunfo, ¿de qué depende que la selección permanezca en esta senda?
- Siento que las generaciones actuales son distintas a nosotros, porque son más creyentes de sí mismos. Pero no hablo sólo de fútbol. Si a los cabros no les gusta la educación que tienen, salen. No les gusta el país que tienen, protestan. Nosotros no. Protestábamos, pero metíamos boche, no hacíamos nada. Y los cabros de ahora no. Desde el punto de vista del fútbol, tú hablas con esta generación de cabros y ellos están convencidos que pueden ser campeones del mundo. Probablemente no lo sean nunca, pero ellos están convencidos de que van a ser campeones del mundo.
- En "Los 23" hubo dos líderes: el capitán y el que tenía mayor experiencia, es decir, Claudio Bravo y David Pizarro, respectivamente. ¿Quién crees que será el sucesor que pondrá la línea de madurez?
- Creo que hay un par de jugadores que tienen características diferentes, no veo como un líder nato como ellos dos que tienen esa personalidad para hacerlo. Ahora hay otro líder, y es un caso bien particular, que es Gary. Se ha convertido en una especie de reserva moral con el paso de los años, que pasó de ser a los 19 o 20 años en el arisco y el díscolo, a ser hoy día de los más profesionales. Ahora, él no tiene la misma personalidad de Bravo de pararse frente a un lote y hablar mucho rato. Él es distinto, es más tímido, es más de su círculo más cercano. Le gustan menos los medios, se maneja menos con los medios, con los dirigentes. En ese aspecto Marcelo Díaz tiene esas características, pero tampoco es tan joven. Está Alexis, que es bien particular porque partió siendo una especie como de liderazgo deportivo, así como "pásenle la pelota a Alexis que es el bueno del equipo" a él tomar el timón y darse cuenta de que lo que él hace influye en el resto. Es particularmente ordenado para entrenar, Alexis es súper profesional. Hay otros que tienen el liderazgo más chico, pero que tampoco son tan jóvenes. Beausejour es un tipo que tiene harta voz dentro del lote, pese que no juega tanto, pero lo escuchan harto. Porque tiene una forma de ser distinta, es un tipo que lee libros, que es más mesurado de repente.
- Sobre la edad, que es una de las preocupaciones de cara a lo que se viene, ¿funcionará la integración de juveniles que se ha dado en los clubes? ¿Resultará como una buena fórmula para inyectarle sangre nueva a la selección?
- Hay cosas que hay que tener en claro. Una, que una generación como esta nace cada veintitantos años, o sea, lo que se venga después de esto no va a ser igual, y no es menospreciar a nadie. Aquí hay un grupo que juega en los mejores equipos del mundo y eso no había pasado nunca, guste a quien le guste. Yo no veo que eso se mantenga mucho rato. Cuando no esté Bravo, Gary, Vidal, Alexis, y yo diría que ellos, no veo más gente que haga eso mismo, que juegue en el Barcelona, que juegue en el Arsenal. Que les vaya bien, sí, que sean buenos. Cuando no está eso, hay que aplicar una especie de cohesión de equipo. Creo que se ve una incertidumbre grande porque además no me imagino a Sampaoli mucho rato más en Chile.
- ¿Las obsesiones de Sampaoli tienen un límite en cuanto a la búsqueda de jugadores por fuera?
- Para Sampaoli, mientras un jugador camine y respire, para él es seleccionable. Es terriblemente pragmático, es súper práctico. Entonces si un jugador puede jugar por la selección, para él es considerado. Su único límite es que reglamentariamente se puede, nada más. Si siente o no siente la selección, si se sabe o no se sabe el himno, le da lo mismo. No solo pasa con esto de nacionalizar jugadores que al final es una idea, pero que todavía no se ve en la práctica. La única obsesión que tiene Sampaoli es ganar. Él quiere ganar, ganar el partido que viene. Ni siquiera creo que se proyecte tanto, quiere ganar. A veces sirve, y en la Copa América harto que sirvió.
- ¿Tú ves que los clubes están formando buenos jugadores?
- No, veo como fábrica de salchichas a los equipos. No hay una política de sacar jugadores para el momento, no veo que los desarrollen integralmente, y si los puedo vender a los 10 partidos, los vendo. Y eso tiene que ver un poco con las sociedades anónimas que controlan los equipos, que ven lucas y millones de dólares en vez de jugadores. El problema de eso es que los cabros que salen precisamente no son tan buenos, porque falta ese eslabón que tuvo Colo Colo, que tuvo la "U", que tuvo Cobreloa. Vidal es producto de eso. En las inferiores no era el mejor del equipo. No tenía un desarrollo físico incluso. A Vidal lo agarran, lo trabajan personalmente, lo tratan de sacar de la pobreza. Medel en la Católica es lo mismo. Hoy día creo que los clubes dicen "apurémonos a lo que juegue", y si juega cinco partidos, vendámoslo. Y cuando llegan afuera, terminan vendidos a malos equipos y volviendo muy luego. Al final el que pierde es el cabro, porque el equipo ganó plata igual. Hay un tema que se va a notar en unos diez años, y se va a notar para mal. Las inferiores, habiendo buena gente que trabaja ahí, tiene el foco muy perdido.
Vidal retorna a los entrenamientos y Perú confirma a Farfán como titular
Después de arrastrar problemas en su rodilla derecha, incluso antes de llegar a Chile, Arturo Vidal retornó ayer a los entrenamientos previos al encuentro de Chile frente a Perú que se efectuará mañana en Lima.
El sábado, el jugador del Bayern Munich realizó trabajos diferenciados y por esta razón el DT Jorge Sampaoli ensayó alternativas para su eventual reemplazo. El intercambio de labores entre Matías Fernández y Jorge Valdivia fue parte del esquema alternativo del casildense.
No obstante, ayer Vidal entrenó a la par con sus compañeros y no evidenció problemas físicos, lo que confirmaría su disponibilidad para enfrentarse a los del Rímac.
En cuanto a los posibles titulares, se analizan dos modificaciones: una línea defensiva en la que Eugenio Mena diría presente y Mark González como parte de la ofensiva liderada por Alexis Sánchez y Eduardo Vargas.
Medidas de seguridad
En tanto, en Perú se espera que la asistencia al duelo frente a la Roja sea masiva, por lo que preparan un riguroso plan de seguridad.
"Habrá más de dos mil policías en los tres anillos del recinto. La seguridad está garantizada", señaló Abel Gamarra, jefe de seguridad de la selección peruana, citado por radio ADN.
"Esto es un encuentro deportivo donde nada tienen que ver conflictos pasados. Somos un par de países totalmente civilizados, y la gente está entendiendo", complementó.
La semana pasada, los hinchas peruanos realizaron una campaña denominada "el rival no duerme", que busca amedrentar a los jugadores de la selección en las afueras del hotel donde se hospedarán, en el Swisshotel de San Isidro.