Lorenzo Lovera

Es sábado de amanecida y Sandro Muñoz Riquelme (40 años) está despierto en su casa de Angol. Sale de su hogar y sube a un camión Mercedes Benz a las 06.10 de la mañana. Es el conductor que está de turno y debe cumplir el protocolo de los horarios establecidos por la Forestal Arauco. Hace andar el vehículo de carga con los planes de llegar a Los Sauces a las 08.25 para cargar madera y luego salir con destino a Arauco. Toma la rotonda Huequén. El viaje por la Ruta R-86 parece tranquilo. De pronto observa que un pequeño vehículo -en cosa de segundos- cruza la calzada estrellándose contra su máquina. Intenta evadirlo, pero no puede, es tarde, demasiado tarde, todo es muy rápido. Es el comienzo de la tragedia de Angol: nueve muertos y dos sobrevivientes.

A tres días de la tragedia que enluta a la Región y el país Sandro Muñoz recibe a El Austral en su casa. En la intimidad de su hogar habla sobre la pesadilla que vivió ese día, sobre cómo intentó ayudar a los heridos, de cómo no puede conciliar el sueño porque no puede olvidar esa dantesca escena.

Mañana infernal

- ¿Qué ocurrió ese día?

- Cuando veo el vehículo, bueno, no sabría decir si era furgón u otro auto, fue todo rápido. Si el vehículo hubiera hecho una cosa antes, yo a lo mejor lo veo de lejos y trato de parar, hacer algo, pero sorpresivamente se vino encima. Ahí yo frené pero ya estaba encima. Posteriormente yo me bajo del camión y me encuentro con la sorpresa que había (su voz se quiebra). Fueron minutos que no sé cómo explicarle porque… Yo conté ocho personas y la niña estaba más acá y ahí la escuché hablar, le enderecé los pies, lo poco y nada que pude hacer porque de ahí no fui capaz, me retiré para allá.

- ¿No pudo hacer nada más?

- Eso pude hacer, la enderecé un poquitito, luego me corrí hacia atrás del camión, en eso llegó un carabinero que fue el primer furgón y atrás mi señora con mi cuñada, más allá no pude hacer nada, me sacaron, prácticamente yo no vi nada más. Después me trajeron a hacerme la alcoholemia, luego volví para allá. Después me regresaron para acá y ahí el fiscal con la SIAT de Cautín vinieron a hacer la entrevista para que contara cómo había sido. Me trajeron para la Comisaría otra vez, me iban a dejar detenido cuando el fiscal llamó para que me dejaran en libertad.

- ¿ Está dolido?

- Yo lo siento harto, estoy dolido porque murieron jóvenes que estaban empezando a vivir… igual me da pena y le pido a Dios que… (llora) si hubiese tenido alguna responsabilidad, aunque lo veo difícil porque yo lo vi encima el furgón, no pude hacer nada.

- ¿Cómo estaba la ruta ese día, había problemas de visibilidad ?

- No nada, estaba claro ya, se veía buena visibilidad porque estaba despejado, no había neblina no había nada.

- ¿Esa ruta es compleja en ciertos horarios?

- Hay horarios de repente que por los camiones cargados, como es una ruta con subida y curvas es lenta para los camiones, de repente se arman unas colas por los vehículos chicos que vienen atrás de uno.

- ¿Es una ruta donde se acostumbra a correr?

- No da opciones. Los autos sí. Todos los camiones nuestros no, porque Forestal Arauco no lo permite.

- ¿Hay un número telefónico en el camión por si alguien ve una anormalidad?

- Hay un teléfono denuncia que llega a la empresa Arauco y de ahí viene para acá, para los dueños de los camiones la sanción. A nosotros nos pillan por rutas prohibidas nos suspenden, nos pillan corriendo, nos suspenden. Así hartas cosas. A nosotros la Corma nos exige. Los camiones son revisados una vez al mes por cualquier falla, anualmente la lanza, todas esas cosas, tornamesa, el perno, todo, si no está en condiciones lo suspenden para que sea reparado. De ahí nuevamente retomamos… Arauco en ese aspecto es bien previsor.

Yo he trabajado varios años, me retiré porque estaba medio cabreado, la pega es sacrificada, en invierno la lluvia, el barro, en este tiempo los tierrales, caminos angostos. Me retiré y estuve en una rampa trabajando en carretera. Me retiré porque pagan muy poco y entré a trabajar hace un año, el 12 de este mes iba a cumplir un año con esta empresa y salía de vacaciones este viernes. Ya tenía todo conversado me iban a dar mis vacaciones, todo. Pero ahora no sé qué va a pasar.".

- ¿Cuando estaba en el lugar dimensionó el accidente?

- Yo conversaba con el otro caballero que después fue el que iba atrás mío, me dijo si yo lo hubiera adelantado a usted amigo me toca a mí. Y le dije ¿qué le pasaría al chofer, se quedaría dormido? No sé, respondió. Yo en un momento pensé que era un furgón con jóvenes que andaban, como era fin de semana, en un carrete. Y después ya se supo que venían a trabajar a los arándanos".

- ¿La sobreviviente le dijo algo?

- Ella se lamentaba y después llegó más gente a prestarle ayuda. Minutos más tarde llegó la ambulancia y después se comenzó a llenar con gente. Yo lo único que le enderecé fueron las piernas un poco y la cabeza, traté que quedara más estirada.

- ¿Recuerda lo que vio tras el accidente?

- No me recuerdo muchas cosas, en un minuto tendí a caerme, pero de ahí me afirmé en el camión un poco, por ver todo eso. Nunca había visto una cosa así, es doloroso, es terrible, no es una persona, son nueve fallecidos".

Sin dormir

- ¿Ha podido dormir?

- Anoche dormí un poquito porque me estaba tomando unas pastillas pero antenoche no dormí nada. Nada, amanecí porque a veces pienso qué pude haber hecho para evitar el accidente y no encuentro respuesta. Uno siempre analiza, cuando anda trabajando, chuta ve el camino y uno piensa chuta qué haría ante un accidente… pero en cosa de segundos apareció el furgón que venía a una velocidad enorme.

-¿Venía a exceso de velocidad el furgón?

- Sí. Después que asomó la curva para acá y se enderezó y ya cerca de mi golpeó fuerte, se sintió el golpe, igual me tiró para afuera un poco.

- ¿Venía rápido?

- Sí, en un vehículo se nota altiro cuando viene rápido. Nosotros todos los días vemos cada cosa en la carretera y la forma que adelantan en curva, diferentes. Andamos todos los días en la calle y entonces todos los días se ve una y otra cosa. Uno muchas veces tiene que frenar y tirarse para afuera para que ellos puedan acomodarse cuando adelantan y no tienen espacio. Yo siempre converso con mi señora y le digo, ¿cómo no van a entender que las de perder las tienen todas ellos?".

- ¿Ha pensado en no subirse nunca más a un camión?

- Sí lo he conversado igual, pero aquí por ejemplo para nosotros, los que tenemos enseñanza media no hay otro trabajo que nos permita ganar un sueldo digno como para vivir. De jornal se gana muy poco y uno ya se ha acostumbrado a ganar un poquito más. Y la única pega es en el área forestal.

- ¿Si hubiese ido con carga el camión?

- No… paso por encima de él. No queda nada.

- El camión estaba prácticamente nuevo, año 2013… ¿Eso a usted lo ayudó?

- Sí, el camión estaba prácticamente nuevo, tiene 200 kilómetros.

- Tiene la dicha de estar con su familia, su hija…

- Como le digo, bajarse y ver a toda esa gente tirada. Yo por eso digo que no me encuentro responsable, el hombre por lo visto no venía en buenas condiciones… Así que, por eso le digo que como si estaba así, echar tanta gente arriba para venir a matarla. Lo veo absurdo, si yo me veo así no voy a hacer eso. Si yo me pusiera a tomar no voy a sacar a mi familia a pasear.

"Yo en un momento pensé que era un furgón con jóvenes que andaban, como era fin de semana, en un carrete. Y después ya se supo que venían a trabajar a los arándanos" "El 12 de este mes iba a cumplir un año con esta empresa y salía de vacaciones este viernes. Ya tenía todo conversado me iban a dar mis vacaciones, todo"

64 km/h era la velocidad que

reportó el camión que conducía Muñoz tras ser impactado por el furgón Kia. 2 personas

sobrevivieron a la tragedia de Angol: Sandro Muñoz Riquelme (40) y Madeleine Vallejos Muñoz (16).