Personas en situación de calle recibieron platos de curanto solidario en Temuco
ALMUERZO. Junto a voluntarios y colaboradores el "Farkas de los Pobres" cumplió otra vez. Repartió 230 porciones.
Ver a un indigente del Barrio Estación de Temuco sacar desde el fondo de un tacho de la basura un trozo de sopaipilla empapada en líquidos percolados para comer algo, le rompió el corazón al gásfiter Carlos Martínez. Él sabía lo que era vivir en la calle. Lo vivió en carne propia. Pero encontrarse con una escena así otra vez lo empujó a dejar de entristecerse y hacer algo para empezar a ponerle remedio a esta realidad.
Han pasado varios años desde este momento clave. Hoy, Carlos Martínez, bautizado popularmente como el "Farkas de los pobres" tiene una historia como organizador de comidas para personas en situación de calles y eventos solidarios para niños y familias de escasos recursos de la capital regional. Esta Semana Santa 2016 no fue la excepción.
Ayer cumplió una vez más con su cometido. Celebró un nuevo curanto solidario en el sector Feria Pinto. Allí, en los alrededores de la garita de Carabineros, se instaló con un puñado de voluntarios para repartir 230 porciones preparadas esta vez para quienes llegaran a esta cita avisada por voz y advertida días antes en las hospederías del Hogar de Cristo.
Esos 230 platos de comida fueron posible este año gracias a la generosa colaboración de Frigorífico Temuco, Pescadería Pez Gordo de Manuel Droguett, Carnes Fina Selección, La Roblería y Miguel Araneda. "Ellos pusieron todos los insumos, y otro poco lo aportaron algunos locatarios de la feria que colaboraron con verduras para las ensaladas y el cocimiento", comentó Martínez.
Impresiones
La actividad estaba programada un día antes, pero por motivos de fuerza mayor tuvo que posponerse 24 horas.
"Esto amerita hacerlo bien. No en vano cuando todo el mundo se dedica a descansar y la mayoría de las personas se olvida de todo tipo de preocupaciones, como suele pasar en Semana Santa, nosotros decimos presente y venimos aquí para regalar un plato de comida a quienes muchas veces no han tenido la suerte de probar un curanto hace mucho rato. Y lo que es mejor, es que este es el 'único restaurante" donde pueden repetirse las veces que quieran", acota el organizador.
El plato este año consistió en un cocimiento en olla que contó con choritos, choros maltones, cholgas, carne de vacuno, pollo, cebollas y otras verduras; cocinados en la población Lanín.
Para repartir la comida Martínez contó con la ayuda desinteresada de voluntarios pertenecientes a la agrupación Temuco Ayuda y ayudantes anónimos como Mirza Salazar que alguna vez fue usuaria del Hogar de Cristo. "Yo vengo a ayudar porque hace un tiempo sufrí un accidente en Villarrica y me quedé sola. Hacer esto me hace feliz", declara Mirza.
En calidad de invitado y colaborador, Luis Coussinard, que vive hace 7 años en la calle, agradeció la comida. "Esto me parece espectacular. He ayudado a servir y me quedé para el último".
"Esto me parece espectacular. He ayudado a servir y me quedé para el último".
Luis Coussinard,, invitado
"Vengo a ayudar porque hace un tiempo sufrí un accidente... y me quedé sola".
Mirza Salazar,, voluntaria
Familiar
El organizador de esta y otras jornadas de similar naturaleza en Temuco, Carlos Martínez, comentó que este curanto de Semana Santa se ha grabado en la memoria de las personas en situación de calle. "Esto se ha vuelto familiar, tanto que conozco a todos los que vienen y a todos los que ya no están también", precisó el gásfiter altruista.