Hombres que fuman a corta edad podrían condenar a sus hijos al asma
GENÉTICA. Problemas respiratorios se triplicarían en los niños a causa del estilo de vida paterno, no así en el caso de las costumbres de las madres.
Fumar no sólo tendría repercusiones en la salud de quien lo hace voluntariamente, sino que, aparte de afectar el bienestar de quienes rodean al fumador, comprometería su herencia genética si esta costumbre comienza alrededor de los 15 años.
Los hijos de hombres que fumaron en la adolescencia tendrían 3,24 posibilidades más de presentar asma en la infancia, frente a la descendencia de quienes nunca han probado el tabaco. Así lo mostró un estudio de la Universidad de Bergen (Noruega).
A lo largo de la investigación los científicos también encontraron que esta situación se daba incluso cuando el padre dejaba el tabaco, aunque fuera años antes de tener hijos, señala la revista International Journal of Epidemiology, donde se publicó el trabajo.
El estudio
Sin embargo, estas conclusiones fueron una sorpresa para los propios autores de la investigación, ya que el objetivo inicial era evaluar la prevalencia de asma antes de los 10 años en la población de Noruega, Suecia, Dinamarca, Islandia y Estonia, así como una posible relación de la enfermedad con el hábito de sus padres.
Bajo esta mirada, los académicos analizaron los historiales médicos de 24.168 niños y adultos, de entre dos y 51 años. Tabulados los datos, estos mostraron que los hijos de los hombres que habían empezado a fumar antes de cumplir 15 años, tenían un riesgo 3,24 veces superior de desarrollar asma no alérgico, es decir, no asociado al polen, antes de los 20 años.
El efecto, además, se vio apenas reducido a 2,68 veces, en los casos en que el padre dejó el tabaco alrededor de cinco años antes de la concepción.
No obstante, cuando los padres comenzaban a fumar una vez nacidos los niños, según el análisis, no influyó en el riesgo de asma del menor
A pesar de que fumar durante el embarazo afecta directamente al embrión, en el caso de las mujeres que lo hicieron antes de la concepción, estas no incidieron directamente en las complicaciones respiratorias de sus hijos, al contrario del efecto masculino antes descrito.
Epigenética
La explicación de este fenómeno, según los autores, se encontraría en que el efecto del tabaco lo reciben los espermatozoides.
"Ya sabemos que fumar causa daños genéticos y epigenéticos (modificaciones del código) en relación al entorno en los espermatozoides. Unos daños que se pueden transmitir a los descendientes y que tienen el potencial de inducir alteraciones en el desarrollo", dijo una de las investigadoras a la revista International Journal of Epidemiology, Cecilie Svanes.
Psicología materna
En conclusión, el ambiente nutricional, hormonal y psicológico de la madre condiciona la respuesta celular y la expresión genética de su descendencia.
En tanto, en el desarrollo de los niños incidirían la edad y estilo de vida de los padres, hecho que parece reflejarse en las moléculas que controlan la función genética.
"Cada vez contamos con más evidencias de los estudios con modelos animales sobre la denominada 'programación epigenética', un mecanismo en el que el ambiente del padre antes de la concepción puede impactar sobre la salud de las futuras generaciones", concluye el informe de la Universidad de Bergen sobre la descendencia europea.
millones de pacientes con asma existirían en el mundo, quienes deben inhalar corticosteroides durante sus crisis. 235