Lorenzo Lovera Seguel
"Vuela alto Alan". Con esas últimas palabras, Óscar Peña, abuelo de Alan Matías Peña Aguilera (13), se despidió de su nieto, quien fue brutalmente asesinado el pasado 12 de diciembre al interior de una mediagua del sector Pedro de Valdivia de Temuco, causa que actualmente tiene a cuatro personas privadas de libertad cumpliendo la medida cautelar de prisión preventiva.
Hasta su último adiós, efectuado en el Cementerio Municipal de Padre Las Casas, llegaron cientos de personas con globos blancos, asegurando que al cielo se fue un ángel que no mereció morir de la forma en como fue ultimado, situación que fue repudiada por todos los presentes.
El mismo Óscar Peña fue el encargado de tomar la palabra y dar a conocer el pensamiento de la familia ante los brutales acontecimientos conocidos el lunes pasado y que conmocionaron a toda la comunidad local y también al país.
Durante su discurso, el abuelo paterno de Alan Peña destacó que su nieto "donde estaba entregaba amor, cariño, por eso nosotros le decíamos El Besador y él debe quedarse con ese apodo", expresó Peña.
Acto seguido, el familiar del menor agradeció las muestras de apoyo hacia la familia, afirmando que aquello "muestra que Alan Matías fue una víctima más en Chile" para luego volver a dar las gracias "porque su nombre se va limpio", en relación a la aclaración de la Fiscalía en sentido que el menor no habría violado a una niña de cinco años.
Por último, Óscar Peña, entregó un sentido mensaje a los presentes para que amen a sus seres queridos, en especial a sus hijos. "Esto que nos sirva para que seamos más cariñosos con nuestros hijos cuando están a nuestro lado, porque ellos necesitan amor, cariño, paz y a veces nosotros no se lo damos; y cuando ya están lejos queremos dárselo", concluyó.
Conmoción
Muchas de las personas que se apersonaron en el Cementerio Municipal de Padre Las Casas no tuvieron una relación de amistad con el menor, ni tampoco con sus familiares. Eso no impidió que llegaran al último adiós, motivados principalmente por la crueldad que experimentaron los victimarios contra el adolescente.
Ana Villanueva fue una de esas personas que se acercó hasta el camposanto municipal y al ser consultada por Alan, sostuvo que "era travieso". La mujer dijo que lo conoció desde pequeño y que al enterarse de lo ocurrido hoy solo espera que "Dios, que es grande y poderoso, y él se va a encargar de todas las cosas".
Otra de las personas que estuvo junto a la familia del menor dijo que Alan "era un lindo niño, no tenía mentalidad de hacerle daño a nadie. Yo lo conocí vendiendo calendarios en las micros, era muy alegre y conmigo siempre fue muy respetuoso; nos dejaba en calendario en las piernas y luego pasaba pidiendo los $100".
La misma fuente le pidió a la justicia que "ponga su mano porque a este niño inocente que no le hacía daño a nadie lo mataron sin tener pruebas; lo hicieron sufrir tanto y por eso pido que se haga justicia de verdad", afirmó.
Inés Rodríguez relató que el caso le tocó la fibra ya que aseguró que una nieta suya también fue violada, pero que el autor del delito sólo pasó un año en la cárcel.
"A mi nieta la violaron y le dieron un año al desgraciado, hoy anda en la calle. Nosotros también podríamos haber tomado la justicia por nuestras propias manos y no lo hicimos", aseveró.
Sename
Horas antes del último adiós al pequeño Alan, el Servicio Nacional de Menores de La Araucanía llegó hasta el Juzgado de Garantía de Temuco para interponer una querella por el delito de secuestro con homicidio contra los cuatro imputados.
Según explicó la directora del servicio, Ximena Oñate, ante los hechos conocidos a principios de semana "nos corresponde actuar para conseguir la mayor justicia y por ello la querella que hemos presentado se ha caratulado como secuestro con homicidio, a fin de perseguir las mayores penas posibles", apuntó.