Saludos a Temuco
Señor director, considero un deber de todo hijo de esa tierra, alguna vez hacer un reconocimiento, en este caso mi ciudad natal. Hijo de madre profesora y padre ferroviario, siempre recuerdo con nostalgia mi infancia en la recordada Población Tucapel. Amigos de entonces, mis estudios básicos en la escuela Standar Nr 5. También allí viví el terremoto de mayo 1960. El cerro Ñielol, su estación y Casa de Máquinas de Ferrocarriles, su hermoso estadio Germán Becker, grandes orgullos de la ciudad. Su feria Pinto, y la distinguida Avenida Alemania. Quizás me faltaron pero pido disculpas. Director, en el reciente aniversario de Temuco mi saludo a mi ciudad.Desde Chillán, Enrique Leonardo Núñez Méndez, empleado bancario
Responsabilidad compartida
A la Mandataria se le carga la mayor parte de los errores de este gobierno, sin considerar que la responsabilidad debe incluir a quienes la convencieron que abandonara su regio puesto en N. York, y principalmente a quienes votaron por ella.
Da la impresión que después de lograr buenos cargos en su gobierno, sus promotores esquivan su responsabilidad, lavándose las manos como Poncio Pilato.
David Benavente
Lo público y lo privado
No importa tanto que el ex Presidente Piñera supiera o no lo de las inversiones de una de sus empresas en Perú. El punto no es ese, no se trata de tener que creerle o no creerle.
Precisamente el conflicto emergente en este caso es que la opinión pública duda. Y claro que tiene derecho a dudar, porque en los hechos, una de las empresas del ex Presidente efectivamente hace el negocio, y no hay forma de saber, salvo creerle como le cree un novio a una novia, que él no tuvo participación ni conocimiento en esa decisión.
¿Y por qué es difícil tener que creer o no creer? Porque no hay un resguardo formal e institucional para que efectivamente ambos ámbitos de su quehacer público estén custodiados por la ética que sólo ofrecen los actos transparentes. No se puede obligar a la opinión pública a creerle a un Presidente sólo porque éste pida que le crean. Y ahí radica el centro del problema. Si se descubriera a posteriori que sí sabía, eso sólo agravaría la falta.
Rodrigo Reyes Sangermani
Felicitaciones a la FF.AA.
Nuevamente FF.AA. dan que hablar en redes sociales y noticias, sí en efecto otra vez pasan a ser parte de los titulares muy a pesar de tantos, sorteando hasta la censura.
Nuevamente el Ejército, FACh y la Armada de Chile están mostrando todas sus capacidades y profesionalismo en momentos de desastre, nuevamente vemos a nuestro soldados ayudando a los más desamparados, otra vez nuestros marinos proveyendo de información y gestionando el desastre, nuevamente la FACh apoyando logísticamente las zonas de catástrofe, entre otras tantas labores.
Valga la redundancia "Nuevamente", dado que al igual que Carabineros de Chile están presentes colaborando y prestando ayuda sin descanso, son quienes a pesar de ser blanco de burlas por ignorantes humoristas y pseudos intelectuales están en terreno prestando ayuda y tendiendo la mano a Chile.
¿Cómo es posible no estar orgullosos de las FF.AA.? Mi reconocimiento a los oficiales, suboficiales y soldados que nuevamente están al servicio de Chile, haciendo honor al juramento a nuestro pabellón.
Ernesto Medalla, analista Círculo Acton
Necesidad en emergencia
Los aluviones de este fin de semana que afectaron a parte de la zona central -y que lamentablemente han dejado a personas fallecidas, desaparecidas o aisladas- nos recuerdan, una vez más, el inmenso poder de la madre naturaleza que se deja sentir, cada cierto tiempo, en Chile.
Sin ir más lejos, hace algunas semanas fuimos testigos de numerosos incendios forestales que se transformaron en una verdadera emergencia nacional, en donde el fuego arrasó por varios días con vidas humanas, poblados y miles de hectáreas consumidas por las llamas.
Asimismo, en diciembre pasado la zona sur del país sufrió las consecuencias de un terremoto de 7,6° Richter, fenómeno que generó pánico entre la población y millonarios daños en infraestructura vial. Frente a estas catástrofes naturales, y a otras más que han afectado con fuerza a Chile a lo largo de su historia, se hace imprescindible contar con un sistema de comunicaciones a nivel nacional que opere ante cualquier eventualidad y que permita a todas las autoridades y organismos de emergencia coordinarse de manera rápida y fluida para levantar información, tomar decisiones y definir las acciones de ayuda y rescate, sin importar el lugar o momento. De esta manera, estaremos como país en mejores condiciones para afrontar situaciones críticas.
Daniel Malaiu, gerente general de Tesacom