Rodrigo Zamorano C.
Atropellado por una camioneta en medio de la intensa lluvia que caía el viernes en la zona costera de La Araucanía, falleció un agricultor de 64 años de edad, identificado como José Molina San Martín.
El hecho se registró cerca de las 12:00 horas, en el camino público del sector rural de Boyeco, en las cercanías de la localidad de Puerto Domínguez. De acuerdo a la versión que entregó la Brigada de Homicidios de la PDI, el hombre presentaba un politraumatismo asociado a un accidente de tránsito.
El jefe (s) de la mencionada brigada policial, el comisario Rodrigo Pizarro, indicó que el accidente se registró luego de que la víctima, junto a otras amistades, se encontraba compartiendo y consumiendo bebidas alcohólicas.
"Tras ello, la víctima fue trasladada hasta la cercanías de su domicilio por uno de sus amigos en un vehículo. Este al dejarlo y al retomar su marcha, realizó una maniobra de retroceso, golpeando a la víctima con el móvil provocándole la muerte", señaló el comisario Pizarro.
El chofer de la camioneta, identificado como Pedro Javier Cofré Ramírez, no se percató del hecho producto del estado de ebriedad en que se encontraba, por lo que retomó su camino, dejando al agricultor fallecido sin entregarle ayuda y a solo 500 metros de su casa.
El hecho fue comunicado a Carabineros del Retén de Puerto Domínguez, quienes dieron cuenta del hallazgo al fiscal de turno, Mauricio San Martín, quien solicitó las primeras pericias en el lugar a la PDI. Tras una serie de empadronamientos la policía dio con el conductor de la camioneta, quien fue puesto a disposición del Juzgado de Garantía de Carahue, donde se amplió su detención hasta el próximo martes.
El fiscal Mauricio San Martín señaló que la medida se decretó a la espera del informe de autopsia que entregará el Servicio Médico Legal.
"La línea investigativa va orientada hacia dos ilícitos, el primero es conducción bajo la influencia del alcohol con resultado de muerte y además no dar cuenta a la autoridad del hecho que le costó la vida a la víctima", detalló el fiscal.
El persecutor confirmó que ambos delitos configuran para el Ministerio Público una invocación de la Ley Emilia, cuerpo legal que endurece las penas para quienes son condenados por delitos de conducción en estado de ebriedad.