Correo
Aguacero en Temuco I
Hay algo que me llama la atención de estas lluvias: No son, ni con mucho, las peores que haya enfrentado la ciudad en tiempos modernos, y sin embargo, en lugares que no suele inundarse el agua llegó a la altura de las deudas. En ocasiones anteriores (posteriores a las labores de obras públicas durante el periodo de René Saffirio) la ciudad aguantó bien, incluso durante los años en los que Huenchumilla fue alcalde, donde las labores de limpieza de colectores de aguas lluvia se hacían tarde mal y a rastras (sin contar con el "genial" arreglo de las esquinas en el centro, cosa que da para crónicas enteras aparte).
Sin embargo, es el reinado de Miguel Becker y ante la primera lluvia digna de tal nombre en todos los años que lleva al mando de la ciudad, queda semejante desastre. Es cierto, en años anteriores habíamos tenido mucha menos agua que, por ejemplo, los años 90, pero parece que a todo el mundo se le olvidó que esto es Temuco. Lo normal es que llueva una sola vez al año (empezando en marzo y terminando en septiembre). Acá no se puede uno olvidar que al Cautín se le respeta; si lo olvidamos cualquier año llega y sale de paseo por las calles que lo rodean. En Temuco no hay temporada seca, con suerte hay calor durante enero. Temuco es una ciudad esculpida por la lluvia, donde mandan los colores gris y verde. Situaciones como ésta debieran estar en la planificación de cualquier momento; no es asunto de "si es que" pasa, sino de "cuándo". Y eso, es algo que jamás debe olvidarse.
Eliel B. Derpich Pavez
Aguacero en Temuco II
A raíz del frente de mal tiempo que afecta a gran parte del país y en especial a la ciudad de Temuco, los habitantes de esa hermosa ciudad y particularmente los peatones, se ven enfrentados a diversas incomodidades y riesgos en su transitar por la ciudad. Me refiero a los anegamientos por el agua que no escurre por las calles porque los pocos espacios sin pavimentar son insuficientes para absorber la cantidad de agua que cae. En la Avenida Alemania casi es imposible caminar por las aceras por la cantidad de agua que hay, pero lo que es lamentable que refleja la inhumanidad y primitivismo es la actitud de los conductores que deliberadamente mojan a los peatones que están en la acera o esperando locomoción de los paraderos.
Mi hija mayor, Javiera, estudia en la Universidad Mayor la carrera de enfermería, se está preparando para atender el sufrimiento del prójimo. Con mucho esfuerzo le arrendé una pieza en la calle 18 de Septiembre y todos los días camina a su universidad a estudiar. Pues bien, hoy (el viernes) mientras esperaba locomoción colectiva para dirigirse al terminal de buses, me contó que los colectivos pasaban llenos de pasajeros y cuando se acercaban a los paraderos bajaban la velocidad, sin embrago, una camioneta bajó la velocidad y cuando se acercó al paradero donde estaba ella y dos niñas más aceleró dejándolas todas mojadas. Mi hija no logró tomar nota de patente ni nada más que se trataba de una camioneta, cuyo conductor inhumano pensó en hacer una gracia. Desde Los Ángeles, le quiero hacer un llamado al alcalde Becker que disponga pasos de peatones del tipo puente, especialmente en los alrededores de la Universidad Mayor, el Mall y cerca del hospital cuando llueve en la ciudad. Al conductor infeliz de esa camioneta le digo que cometió una infracción y arbitrare las medidas para que sea sancionado por la ley.
Ricardo Muñoz Grimm
El ser padre hoy
En el marco del Día del Padre que se celebra este domingo, Aldeas Infantiles SOS quiere saludar a todos aquellos hombres que se esfuerzan a diario en la crianza y formación de sus hijos. Sabemos que es un camino lleno de desafíos, pero sobretodo es un amor fundamental en la vida de los niños y niñas. Poco a poco los hombres han tomado un papel protagónico en la crianza y educación de los niños. Es por esto que la figura paterna es fundamental para el desarrollo emocional de quienes están en etapa de crecimiento. Quisiéramos contar el caso de tres niños que llegaron a Aldeas Infantiles SOS hace unos años porque sus padres estaban viviendo momentos complejos que ponían en riesgo la integridad de la familia. Javier, padre del grupo de hermanos, se propuso luchar contra las adversidades y por 2 años trabajó incansablemente en nuestro Programa de Fortalecimiento y Revinculación Familiar, logrando convencer a los tribunales de familia que sí estaba en condiciones de cuidar sus hijos. Historias como éstas nos enorgullecen y nos inspiran para continuar trabajando con más familias vulnerables que se han tenido que separar. Sabemos que todos los padres cuentan con riquezas personales y pueden desarrollar habilidades para criar y proteger a sus hijos. Nuestra organización realiza una labor en conjunto con especialistas para que todas las personas puedan avanzar en su vida acompañados del amor de cada uno de sus seres queridos, porque sabemos que la familia es el único lugar donde un niño puede crecer feliz y sanamente.
Juan Pablo Orlandini, director nacional Aldeas Infantiles SOS.