Lenguaje audiovisual
Francisco Ortega (42) suma dos capítulos y material adicional a "Salisbury" (Planeta, 2017), su nueva novela; una versión ampliada y corregida de "El horror de Berkoff" (Forja, 2011), donde el periodista y escritor da cuenta de los misterios que encierra el enigmático pueblo ubicado a sesenta kilómetros de Temuco y su casa embrujada.
"La idea de cambiarle el título fue de la editora de Planeta, que le parecía que 'El Horror de Berkoff' adelantaba demasiado la trama de la novela y era muy de nicho. Le dije que el título original del manuscrito era 'Estación Salisbury' y le encantó. Finalmente de 'Estación Salisbury' quedó sólo como 'Salisbury'", contó.
-Francisco, en tu reciente visita a Temuco dijiste que "Salisbury" es una versión corregida y extendida de "El horror de Berkoff", ¿por qué decidiste retomarla?
-Básicamente cuando firmé con editorial Planeta, la idea no sólo era por las novelas nuevas, sino por rescatar las primeras obras. En el plan estaba publicar en 2017, "El horror de Berkoff" y en 2018, "60 Kilómetros". Novelas ambas que no están en ninguna parte y no habían sido reeditadas. Cuando empecé a trabajar en la reedición de "El horror de Berkoff" se convirtió en una reescritura que extendió la novela de sus 180 páginas iniciales a 380, básicamente de un viejo libro nació uno nuevo.
-Es decir, una nueva novela hecha de una previa...
-Esa es la idea. Como la edición original fue a través de una editorial chica, que ni siquiera fue distribuida a regiones, funciona como una novela nueva. Quienes leyeron Berkoff se encontrarán acá con la segunda parte de la novela, desde la página 180 en adelante. Quienes no la leyeron, empezarán desde cero. Siempre me hizo ruido que mi libro más de Victoria y Temuco, no estuviera en librerías de la zona. "Salisbury" es básicamente "La historia secreta de La Araucanía", a través de los miedos y mitos mapuches, enfrentados a los miedos y mapuches huincas, y como tal se hace cargo desde lo sucedido en la mal llamada Pacificación de La Araucanía hasta el tema mapuche de la zona de Ercilla.
-¿Y de qué otra manera aborda el tema mapuche?
-A través de la mitología mapuche, usando lo sobrenatural para referirse a lo real. A lo concreto. Y mediante diálogos del personaje de Pércival Guidotti, que expresan mucha de la opinión que los victorienses tienen sobre este tema, literalmente que los santiaguinos no tienen idea de lo que ocurre y sólo hablan con lugares comunes políticamente incorrectos.
Salisbury
-¿Es Victoria, tu ciudad natal, el origen de "Salisbury"?
-Salisbury es Victoria. Es parte de esa historia secreta. En una biografía de Balmaceda encontré -hace años- una carta que éste le envía a Lord Salisbury, primer ministro de la reina Victoria, donde le indica que en agradecimiento por la ayuda prestada a Chile durante la Guerra del Pacífico iban a rebautizar a uno de los pueblos recién fundados, con la expansión de la línea férrea en 1881, con el nombre de Estación Salisbury. Así que imaginé que Salisbury había contestado la carta de Balmaceda y al cumplir el compromiso, a Victoria le habían cambiado el nombre. De esa manera Victoria se transformó a través del ficticio Salisbury en un pueblo imaginario, con las ventajas de poder ficcionarlo, cambiar nombre de calles, crear edificios nuevos. Salisbury es un Victoria literario.
-¿Cuánto de biográfico tiene tu nuevo libro?
-Más de lo confesable. Los dos personajes principales, Martín y Percy, son dos mitades de mi personalidad. Es mi novela más biográfica.
Ficción evangélica
-En Salisbury vive una comunidad evangélica, ¿cuál es tu vínculo con la religión y qué papel juega en esta historia?
-Yo me crié en una familia evangélica y mi imaginería literaria se la debo a esa crianza. Me alejé de la iglesia porque uno deja de creer con los años y se hace demasiadas preguntas. Básicamente soy agnóstico, creo que hay un Dios, pero no el que me versiona la iglesia. No tengo fe, traté mucho tiempo de tenerla, pero no la tengo. Creo en un Dios desde la perspectiva histórica. Además creo que la iglesia me prohibía tanto lo que me apasionaba: cómics, rock y Star Wars que terminaron echándome sin hacerlo. Pero esa imaginería es clave en mi literatura. Mi ficción es una ficción evangélica. Sin esa formación no existirían ni "Logia" ni el resto de la trilogía de los Césares, ni "Mocha Dick", ni "Salisbury".
-A propósito, en "Salisbury" se nombra a los personajes principales de "Logia" y "Mocha Dick"...
-Parte de la reescritura, Salisbury es la novela que enlaza todas mis otras obras, de alguna manera la que crea mi universo literario, un fortegaverso a lo Marvel. Y es significativo que ese punto de unión sea la novela dedicada a mi pueblo de origen, a la zona de donde soy.
King y donoso
-Alberto Fuguet dijo que "Salisbury" es "una inquietante suma entre los miedos de Stephen King y los monstruos criollos de José Donoso", ¿qué tanto de cada uno de ellos está presente en tu libro?
-Las cosas, la familia como motor del miedo, los fantasmas que se pueden tocar. La novela es básicamente un gran homenaje literario a "El obsceno pájaro de la noche" de Donoso y a "Salem's Lot" e "It" de King. No me puedo hacer el gil con eso. De King está la fantasía del pueblo como creador de miedos, de Donoso lo gótico chileno, pero si en Donoso ese gótico es católico, acá es evangélico.
-¿Cuál es el verdadero terror detrás de "Salisbury"?
-Dos terrores que se enfrentan: ¿qué terror es más intenso, el sobrenatural que despierta a un niño o el real que no deja dormir a un adulto? ¿Qué es más complejo, un vampiro o las deudas que amenazan un embargo?
"Soy agnóstico. Creo que la iglesia me prohibía tanto lo que me apasionaba: cómics, rock y Star Wars que terminaron echándome sin hacerlo". "'Salisbury' es básicamente 'La historia secreta de La Araucanía' y como tal se hace cargo desde la mal llamada Pacificación hasta el tema mapuche de Ercilla". "La novela es un gran homenaje literario a 'El obsceno pájaro de la noche' de Donoso y a 'Salem's Lot' e 'It' de King. No me puedo hacer el gil con eso"."
Sobre "Logia" (2014), Francisco Ortega, quien nació en Victoria, Región de La Araucanía, en 1974, contó que Canal 13 la postuló al Consejo Nacional de Televisión para levantar fondos con los cuales asociarse luego a una productora extranjera, como HBO o Netflix. "Es un proyecto grande y necesita hartas lucas", precisó. Además, existe un tráiler de cinco minutos con Alfredo Castro en el rol de Elías Miele y Daniela Ramírez como Princess Valiant. Por lo mismo, se mostró entusiasta sobre la idea de llevar "Salisbury" a la pantalla grande, ya que "nació como guión de cine, así que me encantaría no sólo llevarla, si no que dirigir la película. Hacerla yo y filmarla en Victoria".