Revisión de colegios
ESPAÑA. Para hoy está fijada la consulta ciudadana convocada por el Gobierno catalán y que el Ejecutivo central considera ilegal y obligó a suspender. Ayer se hicieron multitudinarias manifestaciones en contra de su realización en todo el país.
Ayer, a un día del referendo convocado por el Gobierno autónomo catalán sobre la independencia de la región, España salió a las calles. En varias ciudades del país, y unidos por la consigna de "unidad", varios miles de personas salieron a marchar en contra de la realización de la consulta, que el Ejecutivo central considera ilegal y obligó a suspenderla, sin éxito.
"España unida, jamás será vencida" fueron algunos de los lemas -muchos en apoyo a la Guardia Civil y a la Policial Nacional- de las miles de personas que se concentraron frente al Ayuntamiento de Madrid, convocados por una asociación llamada Denaes que proclama la defensa de la unidad de España.
La de Madrid fue la más numerosa de una serie de concentraciones convocadas en diferentes ciudades del país con el mismo objetivo de proclamar la unidad del Estado, a la víspera de la realización del referendo independentista.
Sevilla, Toledo, Palma de Mallorca, Pamplona, Santander, Valladolid, Salamanca, Logroño y Vitoria fueron algunas de las ciudades que albergaron manifestaciones de rechazo al plebiscito catalán. Todas acabaron con la lectura de varios artículos de la Constitución española de 1978, invocada por la Justicia para suspender la cita de hoy.
Bloqueo electoral
Ayer, las autoridades regionales de Cataluña insistieron en que el referendo sí se realizará, a pesar de las advertencias del Estado español. Sin embargo, la Guardia Civil bloqueó los servicios de voto electrónico al ingresar al Centro de Telecomunicaciones y Tecnología de la Información (CTTI) catalán, lo que supone un duro golpe para los separatistas.
Tras esa medida, el ministro vocero del Gobierno español, Íñigo Méndez de Vigo, aseguró que con el "bloqueo" de las instalaciones del CTTI "se ha asestado un golpe a la organización del referéndum ilegal". La entrada de los agentes de la Guardia Civil en el CTTI impediría, según el vocero, que se pudiera efectuar un eventual recuento de papeletas.
El Gobierno catalán, que confirmó la intervención de la Guardia Civil, advirtió que el bloqueo del sistema informático para el voto electrónico afectará de forma directa a los servicios que presta.
Esta medida judicial se suma a otras adoptadas en días precedentes y que han llevado a la incautación de millones de papeletas de voto, propaganda electoral y notificaciones a ciudadanos para que formen parte de las mesas de votación.
Todas estas iniciativas llevaron ayer a los impulsores de la consulta a afirmar que conseguir un millón de participantes mañana sería ya "un éxito desbordante", en palabras del presidente de la independentista Asamblea Nacional Catalana (ANC), Jordi Sànchez.
El Gobierno catalán convocó a 5,34 millones de personas a votar, dentro de una región cuya población asciende a 7,5 millones. En conferencia de prensa, el líder de la ANC criticó lo que denominó "sitio" del Gobierno español al referendo y reconoció que "con esta presión puede ser difícil una alta participación".
"Con esta actuación queda de relieve que este referéndum ilegal ya ha sido anulado por el Estado de derecho".
Íñigo Méndez de Vigo, Vocero del Gobierno español"
"Con esta presión (de parte del Gobierno español) puede ser difícil una alta participación. Un millón sería un éxito desbordante"
Jordi Sànchez, Presidente de la ANC"
Los Mossos d'Esquadra, la policía regional catalana, anunció ayer que ya revisó al menos 1.300 colegios de los 2.315 que el Gobierno autónomo catalán dice haber dispuesto para la votación de hoy con la intención de clausurarlos y retirar cualquier material electoral que encuentren. De ellos, 163 están ocupados desde el viernes por personas que tratan de evitar que sean cerrados y puedan ser empleados como centros de votación. La policía debe comunicar a estas personas que deben dejar los locales antes de las 6:00 horas de hoy.