Carolina Torres Moraga
Como un joven lleno de vida, deportista, excelente hijo y por sobre todo con muy buena salud es recordado por sus cercanos, Manuel Ignacio Sandoval Llanquitruf, quien falleció inexplicablemente a los 21 años.
Un repentino dolor de garganta que iba aumentando conforme pasaban las horas, lo obligó a dirigirse al Consultorio Miraflores para recibir atención aquel fatídico 27 de octubre de 2017. A las 16.39 horas fue fichado su ingreso, recibiendo la primera atención médica alrededor de las 21.30 horas donde fue examinado por uno de los profesionales de turno que no advirtió mayor grado de severidad en los síntomas, luego de ver el resultado de una radiografía de tórax.
Según su madre, Karina Llanquitruf, Manuel recibió un trato poco deferente, incluso con burlas por su sobrepeso y por su fobia a las agujas. "Aunque se insistía en que no tenía problemas respiratorios, yo les dije ¿pero cómo si mi hijo siente algo como una pelota en su garganta?", señala Karina.
Más tarde, se le hicieron exámenes de sangre que tres horas después arrojaron como resultado una infección severa. Por ello, se le administraron antibióticos y corticoides siendo dado de alta alrededor de las 2 de la madrugada del día 28 de octubre con indicación de volver al día siguiente para continuar con el tratamiento. Al salir del lugar, el joven presentó dificultades para respirar, por lo que su madre ya completamente desesperada, volvió a entrar al consultorio para pedir ayuda.
"Mi hijo entró con su carita casi toda morada, por lo que le pedí a otro doctor que estaba ahí que me ayudara porque mi hijo no podía respirar... Alcanzó a llegar a la camilla y le dio un paro respiratorio del cual tardaron 15 minutos en reanimarlo... Mi hijo nunca más despertó y después de 12 días falleció", expresa con dolor la madre del estudiante de la carrera de Ingeniería en Construcción de la Universidad Autónoma.
Efectivamente, tras el paro cardíaco el joven fue derivado al Hospital Hernán Henríquez Aravena donde permaneció internado en la UCI con diagnóstico de muerte cerebral, falleciendo 12 días después, provocando un profundo dolor entre sus familiares y amigos quienes aún no se explican cómo pudo ocurrir un desenlace tan lamentable.
Pide justicia
En medio de su dolor e impotencia, Karina Llanquitruf clama por justicia para su hijo y asegura que no descansará hasta que existan severas sanciones para los responsables de la muerte de Manuel, la que a su juicio con una atención oportuna y un diagnóstico acertado, se pudo haber evitado. "No quiero que nadie más pase por esto, nadie se merece un trato indigno, sea en un consultorio, en un hospital o en una clínica. La salud es un derecho para todos", asegura la madre quien ya inició acciones legales para establecer las responsabilidades civiles y penales en el caso.
De hecho, en la Fiscalía local de Temuco hay una causa en curso que lleva adelante el fiscal adjunto Ítalo Ortega por cuasidelito de homicidio, en base a las pericias efectuadas por la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones.
En forma paralela, se está llevando adelante una acción judicial patrocinada por el abogado Carlos Ulloa González quien explicó que "hay un trámite previo (a la demanda civil) que es una mediación en el Consejo de Defensa del Estado que es obligatorio para poder iniciar la demanda civil. Una vez terminado el proceso de mediación, el Consejo otorga un certificado de que se cumplió con el trámite y con eso se puede iniciar la demanda civil" en caso que no se llegue a un acuerdo entre las partes, lo que en definitiva ocurre en un alto porcentaje de estos casos.
En tanto, si bien fue solicitada la versión de los hechos al Servicio de Salud Araucanía Sur, organismo del cual depende el Consultorio Miraflores, no fue posible obtenerla debido a que la entidad no se refiere a los procesos judiciales en curso. Sin embargo, según el relato de la afectada, existiría un sumario administrativo en el centro de salud donde se desencadenaron los hechos.
Asimismo, la historia de Manuel también ha sido difundida ampliamente por las redes sociales e incluso compartida en la página de Facebook "Temuco Pide Justicia" donde son expuestos casos de connotación pública.