Camilo Garrido Maldonado
El futuro energético del país será una reconversión cada vez más creciente hacia la electricidad. Esa es la apuesta de Claudio Seebach, presidente ejecutivo de la Asociación de Generadoras de Chile. Pero para eso, advierte, es necesario aplicar el sentido de responsabilidad social al momento de formular las iniciativas.
"Es imposible pensar el desarrollo de un proyecto de cualquier tipo de inversión, y en particular de energía renovable que ocurre en territorios naturales (...) que no se haya hecho primero a través de un trabajo de diálogo muy temprano con las comunidades", indicó el ingeniero industrial eléctrico, quien considera como fundamental en estos casos el respeto, "en especial a una Región con la particularidad de ésta, y teniendo claridad de los derechos, de las costumbres, de las prácticas de los pueblos indígenas. En ese marco, es la única manera viable de desarrollar proyectos, porque si no se desarrollan, al final son todas las partes las que pierden esta oportunidad de desarrollo".
Necesidad
Las palabras de Seebach se dan en el marco de la necesidad de incrementar la producción energética.
"La Araucanía es una Región bastante rica en energía eólica, muy abundante tanto en la costa de La Araucanía como en la zona de Malleco, como también es una Región que tiene hidroelectricidad e históricamente ha tenido, poco desarrollada, pero también es una Región con potencial geotérmico", indicó.
El presidente ejecutivo de Generadoras considera que es necesario impulsar proyectos de generación eléctrica para el futuro que depara al país. ¿Por qué? Porque la transformación eléctrica sería la consecuencia directa al problema de la contaminación, apuesta el representante de Generadoras.
"En realidad la competencia no es con el pellet, la competencia es un problema de sostenibilidad ambiental, que la principal leña que nosotros consumimos es no certificada en estufas no certificadas, y eso es un problema social, que deriva en un problema ambiental y de salud", indicó.
El seremi de Energía, Erwin Gudenschwager, concordó con Claudio Seebach, tanto en la visión de futuro energético como en el de sentido de responsabilidad.
"Si bien es cierto los objetivos son distintos, nosotros tenemos un objetivo que tiene que ver con el Estado, que es un tema de largo plazo además. El Ministerio de Energía tiene una guía de participación temprana, porque yo creo que hay un primer factor que es importante y que yo respeto, y ese en algunos instantes no ha estado", consignó la autoridad regional.
Esta guía, como indica el seremi, ya ha sido entregada a seis municipios de La Araucanía, a través del cual se asume un compromiso entre los jefes comunales y los creadores de proyectos energéticos, para acordar condiciones a las obras para la creación de las mismas.
"Esos estándares son anteriores incluso a lo que es el proceso ambiental, de tal manera que cuando entra al proceso ambiental ya tiene un avance significativo en relación con las comunidades, y no sólo me refiero a las indígenas, sino que en general, al entorno del proyecto", consignó Gudenschwager.
El presidente ejecutivo de Generadoras también hizo alusión al Convenio 169, indicando que existe un aprendizaje mutuo en cuanto a su consideración y aplicación para los proyectos.
"Todos tenemos que aprender a entender, más allá del convenio, cuáles son las responsabilidades de todas las partes", indicó.
Pero aparte del sentido de respeto hacia las empresas, Seebach dijo que también existe otro tipo de consideración, haciendo un llamado a los usuarios de la energía regional. "También requiere responsabilidades adicionales de esas comunidades de ejercicio de ese derecho, para que efectivamente no sea un instrumento para impedir el propio desarrollo", indicó.