Agencias
El Presidente de Francia, Emmanuel Macron, exhortó ayer a decenas de líderes mundiales reunidos en París a cooperar y defender las instituciones internacionales para evitar los errores que llevaron a los conflictos del siglo XX. "Sumemos nuestras esperanzas en vez de oponer nuestros miedos", dijo el Mandatario francés en la conmemoración del centenario del fin de los combates de la Primera Guerra Mundial en el frente occidental.
Según El País de España, al pie del Arco del Triunfo, bajo una lluvia persistente, el grupo de Jefes de Estado y de Gobierno escenificó dos visiones: la de los defensores del llamado "orden liberal", con Macron y la canciller alemana Angela Merkel a la cabeza, y quienes lo cuestionan, como el estadounidense Donald Trump. Entre los asistentes, se encontraban también el Presidente ruso, Vladímir Putin, y el turco, Recep Tayip Erdogan.
"El patriotismo es el exacto contrario al nacionalismo. El nacionalismo es su traición", dijo Macron, que cargó contra el "egoísmo de un pueblo que sólo vela por sus intereses", en una crítica velada al "América primero", uno de los eslóganes de Trump, o a su reivindicación del nacionalismo, hace unos días, durante la campaña para las elecciones legislativas en Estados Unidos.
Foro civil
Por la tarde, todos los dirigentes -con excepción de Trump- participaron con miembros de la sociedad civil en un Foro Internacional por la Paz organizado por la presidencia francesa para defender el multilateralismo que ha imperado desde el final de la Segunda Guerra Mundial. Angela Merkel recordó que el proyecto de una Europa en paz está actualmente en entredicho y expresó su preocupación de que "los puntos de vista nacionalistas ganen terreno una vez más. "La paz que disfrutamos hoy, que a veces nos parece como algo evidente, está lejos de serlo, y hay que pelear por ella", declaró.
Mientras tanto, Trump rindió homenaje a los "valientes" soldados de Estados Unidos que murieron durante la guerra, en una visita a un cementerio estadounidense en la periferia de París, un día después de haber sido criticado por suspender su presencia a una ceremonia similar por la lluvia.
"Es nuestro deber preservar la civilización que ellos defendieron y mantener la paz por la que ellos dieron la vida hace un siglo", aseguró el Presidente estadounidense, que elogió a los "valientes guerreros que lo dieron todo".