Religiones y mapuches
Tres religiones participaron en la VI Trawün de Enama: catolicismo, protestantismo y el ngillatun (28.11.18).
Sabido es que toda religión tiene un Dios, un culto y un sistema de creencias. Por cierto, la validez de cada cual no está definida por las tendencias de las mayorías, pues si así fuera el cristianismo hubiese desaparecido desde la partida ya que su fundador fue muerto por la inmensa mayoría del judaismo; además, hoy mismo éste sería insignificante ante la inmensa mayoría del materialismo ateo.
Pero, si consideramos el ngillatun mapuche, en cuanto religión natural, y procuramos una interpretación de sus símbolos fundamentales como son el kultrun y el rewe, descubriríamos que éstos apuntan: el primero, hacia la realidad de la existencia en términos de cuaternidad: divinidad, cielo, tierra, hombre; por los cuadrantes del kultrun y el segundo hacia el hecho inescrutable y sagrado del fenómeno de la vida, por lo que su culto consiste en girar cuatro veces alrededor del rewe, reconociendo que solo Elchen, Dios, es el autor de la vida. Entonces, por estos símbolos, estaríamos ante dos contenidos filosóficos modernos: existencialismo y vitalismo.
Por eso, si un gobierno de la nación -hoy de hecho pluricultural- pasa por alto el derecho mapuche a una educación conforme a su historia, idioma y religión estaría en contra de las "humanidades" propias de toda nación, tribu, lengua y pueblo, porque estaría llevando a este sector social chileno al trágico punto de existir: "vitalmente anulado".
Ciertamente, esta no es tarea exclusiva de Enama, Conadi o del Instituto Indígena, es mandato soberano del Estado de Derecho para sus instituciones político-administrativas, entre otras, seremis y municipalidades.
Sergio Liempi Marín
Menos, es más
Me pregunto si quienes proponen aumentar en más de 4 puntos porcentuales el monto de las cotizaciones están también dispuestos a generar más empleos.
Porque si ya es difícil mantener un trabajo con contrato en estas condiciones, no quiero imaginar qué pasaría si el aumento es de un 7% o un 8%.
Juan Francisco Rosales.
Los Chicago Boys
Bolsonaro coloca a los Chicago Boys en su equipo, Paulo Guedes, que era profesor en la Universidad de Chile e hizo su tesis en la Universidad de Chicago con el premio Nobel de Economía, Robert Lucas, será el ministro de Economía. Con esto, los inversionistas miran con satisfacción quien va a dirigir el área económica de Brasil ya que saben sus efectos: reducir el déficit fiscal y la deuda pública, fortalecer las privatizaciones que ya había iniciado Michelle Temer y proyectar un sistema de pensiones parecido al chileno.
Rubem Novaes que manejará el Banco do Brasil, -uno de los bancos más poderosos de Latinoamérica- es otro de los Chicagos Boys. Posee un doctorado en el área de Economía que dirigió Milton Friedman. Siendo Roberto Castello Branco, quien estará a cargo de Petrobras, y fue un becario en la Universidad de Chicago.
Si miramos Chile como ejemplo: "es un caso de estudio, no sólo desde el punto de vista del desarrollo económico y político, sino también por las condiciones de desarrollo humano. En ese sentido, sin duda es una demostración empírica de que las ideas tienen consecuencias y que el tiempo no es sinónimo de progreso… Chile no fue un "milagro", sino que fue el resultado de un trabajo duro, donde se establecieron lineamientos, se institucionalizaron procesos base y se cambió un país.
Brasil es el siguiente. Bolsonaro vislumbra un cambio profundo.
María Celsa Rodríguez
Las apariencias engañan
Los chilenos por naturaleza discriminamos a las personas por su apariencia física, pero en muchos otros casos por la forma como están vestidas.
Esta situación se da principalmente en el comercio y lugares donde la persona solicita atención pública o privada. Al bien vestido se le trata como un rey y al mal vestido como el bufón del rey. Sin embargo, resulta que el de terno y corbata muchas veces es solamente " la pinta" y sí el rey, pero de los "malabares".
En cambio el que viste modestamente y es más humilde, demuestra con hechos y no palabras que es una persona honrada y digna de un mejor trato.
Jorge Valenzuela Araya