El triunfo de Universidad Católica ante Colo Colo y que le permitió a los cruzados trepar al liderato del Torneo Nacional dejó una serie de hechos antes, durante y después del encuentro disputado en el estadio Monumental ante 40 mil espectadores.
Esto es lo que no se vio de la victoria de los franjeados en una nueva versión del clásico en Macul.
EL "CHAPA"
Cada vez que un equipo va al Monumental, el recibimiento de los aficionados locales a los jugadores visitantes es hostil y poco amigable. Pero ayer José Pedro Fuenzalida fue recibido de otra manera. El "Chapa", quien incluso fue capitán albo hace unas temporadas, recibió el cariño de los hinchas, quienes lo aplaudieron cuando su nombre sonó por el alto parlante. Pero no sólo de los forofos, también de los propios jugadores: Terminado el pleito, Fuenzalida se dirigió a saludar a sus ex compañeros y conversó amenamente con Jaime Valdés.
CONTRA EL ÁRBITRO
Si bien el arbitraje no influyó directamente en el resultado, en el camarín cruzado hubo tibias quejas por la conducción del árbitro Piero Maza. Luciano Aued se enojó con el juez, quien lo amonestó en el lance por airados reclamos. El argentino lejos de calmarse después de esa amarilla, siguió enfrascándose en diálogos con el juez, quien en una ocasión lo advirtió. El ex Racing por momentos rozó la expulsión, pero finalmente jugó todo el encuentro.
PINARES DESTACADO
El volante de la UC fue una de las figuras del encuentro. Por lo mismo, fue constantemente blanco de faltas de sus ex compañeros. De hecho, se retiró algo maltrecho. Pero no sólo se llevó los golpes de los locales. También las pifias constantes y los insultos de los simpatizantes albos. "Ahora jugai bien", le gritaban los colocolinos.
PAREDES
Esteban Paredes no había sumado minutos en el Torneo. Pero eso cambió. El atacante ingresó en la caída del Cacique ante la UC, algo que calmó a los fanáticos, quienes pedían desde el minuto uno el ingreso del delantero. "Mario, pégate la 'cachá'", "regalaste todo el primer tiempo, Salas", "mete a Paredes", fueron de los tantos gritos que se escucharon en el estadio contra el estratega.
EL MONUMENTAL
Para este clásico el recinto de Macul pudo recibir el aforo máximo permitido por la Intendencia: 40 mil personas. Algo que no se daba desde el 25 de agosto de 2018 para el Superclásico con la U. El Monumental pasó la prueba, aunque muchos aficionados sufrieron con el fuerte sol y los lados con sombra por momento se vieron atochados.
DESCONTROL
Colo Colo había logrado acercarse en el marcador y parecía que el empate estaba al caer en Pedrero. Mario Salas vio los últimos cinco minutos parado y ante cada falta en contra de su equipo, se volvía loco, tomándose la cabeza y alegándole al cuarto árbitro, quien en más de una ocasión le indicó que se calmara. Histrionismo puro del DT del Cacique, quien sobre el final, mostró algo de cordura al separar a su PF Osvaldo Alegría que se fue corriendo a recriminarle a Maza que había terminado el partido antes del tiempo adicionado estipulado.