No por 30 pesos, por 30 años
Donde dice: ...y explotaron las protestas de los chilenos (capitalinos) porque el Metro lo subieron en 30 pesos.
Debe decir: ...y explotaron las protestas de los chilenos porque han pasado 30 años y todo lo prometido hasta la saciedad por los integrantes de la Familia Política & Asociados a lo largo de los mismos, no se ha cumplido y además los más favorecidos han sido ellos mismos.
Luis Enrique Soler Milla
Crisis del modelo
El modelo neoliberal llegó a Chile de la mano de Milton Friedman y los Chicago Boys, en su momento sirvieron para edificar lo que se denominó el "milagro económico chileno", posterior a eso se construyeron fuertes cimientos para sostener el sistema implantado, dotándolo de una Constitución y de un sistema electoral que garantizaría la estabilidad suficiente para mantenerlo y que no sufriera las alteraciones que vivieron los países de la Región.
Este modelo se sostuvo hasta la década de 1990, consolidado en las administraciones de los presidentes Aylwin, Frei, Lagos y Bachelet, poniéndose énfasis en el gasto público social, la reducción del desempleo, la pobreza y resguardar la estabilidad macroeconómica. Por lejos el período de mayor crecimiento económico de la historia, pero también uno de los peores del mundo en cuanto a distribución de los ingresos, factor que no ha podido ser resuelto en las sucesivas administraciones, impedidas por el mismo sistema que cimentó el modelo.
Las manifestaciones en Chile no deben ser entendidas como un desprecio sostenido hacia el libre mercado o al capitalismo, no es una protesta de clase, ni tampoco una protesta ideológica, es una respuesta total contra nuestros representantes, acaso algún estadista o ministro de gobierno hubiera predicho que sus dichos no contribuyeron en nada a disminuir el estallido de la olla a presión social, la clase política, mejor dicho la casta política se enfrenta al mayor dilema de nuestra democracia moderna, por ser representantes no del pueblo, sino del sistema de privilegios que sustenta al modelo que nos rige.
Enrique Caamaño Medina
Resultados, no palabras
Algo tan evidente como la acción planificada de un grupo organizado en la quema casi simultánea de muchas estaciones de Metro está siendo confirmada con las declaraciones del senador Ossandón que esperemos conduzcan a los responsables. Las policías, la Fiscalía y todo el aparataje de seguridad del Estado debiera tener resultados concretos en 7 días como en cualquier país bien organizado.
Mientras tanto, los responsables de la Agencia Nacional de Inteligencia (ANI) deberían trabajar 24/7 en una investigación urgente: ¿Por qué todavía no han presentado sus renuncias?
José Luis Hernández Vidal
La pobreza de mi país
Como todos los chilenos siento pena por la situación que hoy vivimos. La reacción en cadena del pueblo que ha salido a protestar no es otra cosa que la válvula de escape de una olla a presión que estaba acumulando energía por años; si lo interpretamos como un efecto físico, reventada la presión, pronto se vuelve al estado de equilibrio inicial, pero como es un efecto social creo no es sólo cuestión de tiempo, más aún cuando se le sigue poniendo "presión" al sistema; pueden pasar semanas sin bajar esa presión con efectos impensados y no administrados, todos negativos para la población.
Sin pretender tener la bolita mágica de la solución, pero con el ánimo de aportar un grano de arena, donde el denominador común es bajos ingresos, altos costos de vida y una desigual distribución de la riqueza, enumero un par acciones que se pueden tomar con efecto inmediato y que, creo, ayudarían a quitar presión al sistema: a) asignar fondos para terminar lista de espera en los hospitales, b) regular el precio de los medicamentos, c) pagar el 30% de las ganancias de las empresas como gratificación a los trabajadores (eliminar el tope que hoy permite la ley laboral), d) en las AFP que todos participen del riesgo de inversión, esto es, que los dueños de las AFP también pierdan cuando pierden los cotizantes por caída en el valor de las inversiones.
Como, claro está, son problemas acumulados por años, es iluso pensar en que se solucionarán en un día, entonces necesitamos una señal que muestre voluntad de cambiar. Para el mediano plazo queda la tarea a los académicos de dar origen a un nuevo modelo económico para la distribución de la riqueza, donde el eje central sea igualdad en la educación, para emparejar la cancha para todos. Hoy los que dirigen el país (Gobierno, Senado) tienen la oportunidad de enmendar el camino que ha llevado el país al escenario actual; habrán consecuencias, pero necesarias para sincerar nuestra realidad.
Estamos en crisis y creo el Gobierno y Senado deberían funcionar bajo ese escenario y no como si nada ha pasado.
Luis Toro Castillo
