Carlos Valverde
Alfonso Melillán Montiel, director de los Traperos de Emaús, dice que la hospedería nació para asistir a la gente que no tenía donde dormir en el Temuco de 1968. Antes del incendio ocurrido en octubre del 2016, la hospedería contaba con una capacidad para 50 personas. Hoy, con mucho esfuerzo y ayuda de diferentes organizaciones, pudieron reparar y levantar un espacio para 22 personas, el cual está destinado para albergar a gente en situación de calle.
"Esta hospedería es financiada por el trabajo nuestro, cada día salimos a recolectar muebles, electrónica y línea blanca para repararlos y después ponerlos a la venta en nuestro galpón, con ese dinero sostenemos una comunidad de vida de gente que vive y trabaja acá. Nosotros tenemos que pagar, el agua, la luz y la alimentación, esas han sido las tres grandes necesidades, pero ahora debemos sumar mascarillas, jabón, entre otros artículos para el aseo", cuenta Melillán.
Hay un mundo dentro de Los Traperos de Emaús, historias personales que se encuentran dentro de la comunidad. Una de ellas es la de Juan Pablo, quien era chofer de micro y por vicisitudes del destino terminó viviendo en la calle, donde pasó una temporada en la hospedería de Los Traperos. Actualmente se desempeña en el taller de mueblería, siendo parte de la comunidad que vive y trabajo en la institución.
"Estuve 9 meses en la hospedería y me preguntaron un día si quería entrar a la comunidad y acepté. Estaba muy lanzado, lo perdí todo, porque a veces los excesos te pasan la cuenta, ahora estoy lúcido, trabajando, con mi mente ocupada, estoy bien ahora, bastante mejor de como estaba antes, volví a aterrizar en mis objetivos y acá me dieron las herramientas. En esta ciudad hay bastante necesidad con la gente vulnerable, es importante ayudar", dice.
UNIDOS
Carlos Figueroa, vive en la hospedería hace 18 años. Sentado en lo más alto de escalera de la hospedería, disfruta de los rayos del sol, junto al huerto orgánico de la comunidad.
"Soy solo y estoy acompañado acá, y al margen de eso, tengo amigos. Se preocupan de nosotros y eso es importante, sobre de todo nosotros los adultos mayores. Hay una unión tremenda de grande, la gente igual necesita de ayuda solidaria sobre todo en estos tiempos de pandemia", comenta Carlos Figueroa.