El Presidente Sebastián Piñera realizó el quinto cambio en su equipo de ministros tras varios días de presiones desde los partidos de Chile Vamos, luego de la derrota política que sufrió el Gobierno en el Congreso con la aprobación de la reforma que permitirá el retiro del 10% del ahorro previsional de los chilenos.
Los cambios parten con la salida del jefe del gabinete, Gonzalo Blumel (Evópoli), y la llegada del UDI Víctor Pérez a esa cartera. A él le corresponderá coordinar a la coalición en el más cercano de los procesos que enfrentará: el plebiscito constitucional. Aunque desde la oposición el ajuste ministerial fue calificado como la conformación de un "gabinete del Rechazo", con miembros de "la derecha más ortodoxa".
"Convoco al gabinete y Chile Vamos a emprender una nueva etapa, para nuestro gobierno y el país, con un verdadero espíritu constructivo", dijo el Mandatario y pidió "colaboración y aportes a los partidos de oposición, a los diputados y senadores", así como "la comprensión, unidad y colaboración de la sociedad civil y los chilenos de buena voluntad, para superar la emergencia y volver a caminar y recorrer las rutas y los sueños del futuro".
Quinto cambio
Es el quinto cambio de gabinete desde que Piñera llegó al poder en marzo de 2018, pero esta vez echó mano al Congreso. El último fue el pasado 4 de junio.
"Este es un equipo que viene a fortalecer, a motivar a que verdaderamente Chile se vuelva a poner de pie poco a poco (...) Van a tener un gabinete abierto, transparente, que va a dar la cara", dijo Víctor Pérez, nuevo ministro del Interior, quien expresó: "Vamos a trabajar intensamente para la unidad de Chile y de Chile Vamos". Anunció una "especial preocupación" por La Araucanía.
En la Secretaría General de la Presidencia, Claudio Alvarado (UDI) deja paso a Cristián Monckeberg (RN), que fue sucedido en Desarrollo Social por Karla Rubilar. La vocería, en tanto, será encabezada por el hasta ayer diputado Jaime Bellolio (UDI). "No es el gabinete del Rechazo; es el gabinete que no quiere descansar hasta que todas las personas puedan salir bien de la pandemia", expresó.
Otra incorporación relevante es la del hasta ayer diputado y presidente de Renovación Nacional, Mario Desbordes, quien reemplazará a Alberto Espina (RN) en Defensa. Desbordes reconoció que "pudo haber conflictos o diferencias con el senador Allamand" en el último tiempo, pero dijo que "ya desde hace varias semanas hemos manifestado que vamos a trabajar unidos en lo que viene como coalición".
El también RN Andrés Allamand, exsenador, llegará a la Cancillería para suceder a Teodoro Ribera, del mismo partido. Allamand adelantó que una de sus prioridades será "el afianzamiento de nuestra relación con Argentina".
Como fue uno de los impulsores del comando por la opción Rechazo, fue consultado por el tema y respondió que el rol suyo y del nuevo equipo es "sacar adelante el Plebiscito de la mejor forma posible, en un ambiente de plenas garantías y que contribuya a una máxima participación ciudadana.
Hoja de ruta
El jefe de Estado planteó la hoja de ruta del gabinete en lo que resta de su administración, hasta marzo de 2022. Esta incluye seis prioridades, explicó. Una es "seguir enfrentando con rigor, eficacia y responsabilidad el coronavirus, protegiendo la salud de los compatriotas y consolidando la mejoría". Otra es "fortalecer y desplegar en plenitud la red de protección social, para proteger en esta emergencia los empleos de los trabajadores, el ingreso de las familias, la sobrevivencia de las Pymes y el abastecimiento de bienes y servicios iniciales para la calidad de vida". Al respecto, informó que más de 2,4 millones de familias chilenas están recibiendo el tercer aporte del Ingreso Familiar de Emergencia.
También apuntó a "impulsar con mucha fuerza la recuperación de nuestra economía y de nuestro país (...) Son 1.500.000 empleos perdidos que tenemos por recuperar"; en esa línea, llamó a "crear oportunidades" para todas las empresas y recuperar la capacidad de innovar y emprender. La cuarta tarea es "impulsar la segunda etapa de la reforma a nuestro sistema previsional", con el fin de "mejorar las pensiones de los actuales y futuros pensionados, sobre todo las mujeres, la clase media y los adultos mayores no valentes".
Su quinta prioridad es "asegurar el orden público y resguardar la seguridad ciudadana", y la sexta es "garantizar la realización transparente, pacífica y participativa de las siete elecciones que deberemos enfrentar entre octubre y diciembre del año próximo, incluyendo el plebiscito".