Sorpresiva afluencia vespertina marcó la jornada de primarias presidenciales
ELECCIONES. En una jornada "tranquila" según La Moneda, el proceso eleccionario logró convocar -sobre todo durante la tarde- a un mayor número de votantes que en las primarias de 2017 y que la reciente elección de gobernadores.
La postal se repitió en varios locales de votación en el país: mañanas de pocos votantes, y largas filas -al filo del cierre de las mesas- de votantes durante las tardes. En una jornada tranquila, las elecciones primarias presidenciales de los pactos Chile Vamos y Apruebo Dignidad concitaron una participación mayor a la que se había presupuestado en los análisis previos, pese a coincidir con un fin de semana largo y una mayor flexibilización en la movilidad territorial.
Desde La Moneda se calificó como "tranquilo" el proceso -salvo incidentes menores, como personas que se negaron a ser vocales y votantes que fotografiaron su voto-, y defendieron la difusión hecha del proceso en la previa, asegurando que siempre fue "importante incentivar esta participación", según Jaime Bellolio.
Con el Presidente Piñera votando a primera hora -al igual que la mayoría de los seis candidatos en contienda- y deseando a quienes ganen la contienda que tengan "un fuerte y claro compromiso con la libertad de todos los chilenos, con la paz y la seguridad de todos los chilenos", el proceso no tuvo grandes contratiempos.
¿Y los candidatos? Boric se encaramó varias veces al "árbol de la franja" en Punta Arenas; Sichel llegó a votar con sus hijos -uno de los cuales, en TV, aseguró que no imaginaba a su padre como Presidente-; Lavín dijo haberse "entregado a la democracia". Jadue, quien llegó a votar con la alcaldesa de Santiago Irací Hassler, tuvo un tenso cara a cara con los medios; Briones se mostró seguro de "dar la sorpresa" y Desbordes estuvo incómodo al ser encarado en su local de votación, en Colina.