Peter Jackson encuentra luz en el ocaso de Los Beatles
Disney+ estrenó "The Beatles: Get Back", serie que el director de "El señor de los anillos" articula con material de las grabaciones del "Let it Be", el último álbum de la banda de Liverpool.
Cuando Peter Jackson se asoma es para asombrar. Sus primeras películas inspiraron a muchos a filmar sin presupuesto (especialmente "Bad Taste", un clásico de la era VHS), pero luego nos golpeó con ese mazazo millonario llamado "El señor de los anillos", hizo un par de cosas más y desapareció del mapa, aparentemente dormido sobre los cómodos laureles que le dio la saga basada en la obra de J.R.R. Tolkien.
Hace unos meses, sin embargo, reapareció en YouTube, hablando directamente a la cámara para contarnos que estaba trabajando en una nueva serie documental sobre Los Beatles. Parecía un vendedor telemático prometiendo un artículo exclusivo y nunca antes visto. Los fans de la banda de Liverpool desconfiamos porque, además de las chispeantes películas de Richard Lester, el documental para televisión "Let it Be" y los registros documentales que se reutilizan hasta el hartazgo, entre otros trabajos conocidos, sabemos que no hay nada nuevo bajo el sol de Liverpool. Pero no nos olvidemos que se trata de Peter Jackson, el poderoso dueño de cajas de sorpresas.
"The Beatles: Get Back", dividido en tres episodios, se estrenó esta semana en Disney+ y no es un engaño. De hecho, se acerca bastante a una fantasía soñada: la posibilidad de que exista material exclusivo sobre la banda de rock más importante de la historia. Ese material se desprende directamente de las grabaciones de "Let it Be", crónica amarga del ocaso de Los Beatles que Michael Lindsay-Hogg estrenó en el año 1970 con la intención de reflejar las tensiones que llevaron al grupo a la disolución. El foco fijado por el director dejó fuera, sin embargo, las digresiones, el humor, los tiempos de relajo que ahora Jackson recupera para ampliar ese momento crucial que consistió en 21 días en el estudio de grabación y, como broche de oro, el famoso concierto sobre el techo del edificio de Apple en el barrio londinense de Saville Row.
"Hubo horas y horas de nosotros simplemente riendo y tocando música en el estudio. Hubo mucha alegría y creo que Peter lo demostrará", confesó Ringo Starr, desmintiendo el mito negro que pesa sobre las sesiones del álbum de despedida de la banda. Jackson, por su parte, definió a "The Beatles: Get Back" como "un documental sobre un documental" que no pretende pisar el trabajo de Michael Lindsay-Hogg, sino que ampliar la mirada. Dijo también que se sintió aliviado al descubrir que "la realidad fue muy diferente al mito".
De mitos se nutre acaso la filmografía de un director ambicioso que se acercó a la fábula simbólica y fantástica de Tolkien, se atrevió a reformular un clásico del cine como es "King Kong" con todas las posibilidades tecnológicas de nuestros tiempos y ahora desmitifica la supuesta batalla de egos que, según la historia oficial, derrumbó uno de los proyectos musicales más grandiosos de nuestra cultura y distanció fuertemente a John Lennon de Paul McCartney. La serie vuelve a narrar esa historia considerando la paleta de matices que tienen las relaciones humanas. Opera en el territorio de los grises para resaltar las emociones contrapuestas que revolotean al interior de una banda de rock, especialmente una tan lúdica y singular. Todo esto, por supuesto, con la máxima fidelidad visual y sonora. "The Beatles: Get Back" es una experiencia sensorial que trasciende el mero testimonio.
El cineasta Peter Jackson definió su trabajo como "un documental sobre un documental".
En resumen
Jackson pasó más de cuatro años en el estudio para montar la serie.
Por Andrés Nazarala R.
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