Correo
Integración de menores
Existen múltiples disciplinas que se encargan de la rehabilitación y la integración de niños, niñas, jóvenes y adultos.
En el contexto del área educativa existen múltiples profesionales que se encargan de la integración de los niños, por ejemplo, los técnicos en Educación Diferencial, las educadoras diferenciales propiamente tales, fonoaudiólogos y terapeutas ocupacionales.
Respecto de estos últimos profesionales, me quiero referir ya que la labor actual en el ámbito educacional se encuentra sobrevalorada y en cierto modo monopolizada por estos profesionales, no permitiendo que se apliquen nuevas estrategias en el ámbito educativo que permitan un mayor provecho y desarrollo de los niños, niñas y adolescentes en el plano educativo.
Los planes de intervención se encuentran supeditados a lo mencionado por el profesional terapeuta, los cuales en ocasiones ven al estudiante solo una o dos veces por semana y no consideran de modo alguno la opinión de los técnicos diferenciales que somos los que realizamos el trabajo diario y en aula con los estudiantes.
La terapia ocupacional está sobrevalorada y esto quiero que sea un llamado de atención a dichos profesionales ya que la integración escolar no es solo trabajo de una área, sino que debe ser un trabajo multidisciplinario con miras a mejorar el proceso educativo de los estudiantes.
Claudia Oliveros Silva, técnico en Educación Fiferencial
Próximas elecciones
Frente a las próximas elecciones -(apruebo o rechazo a la nueva Constitución) como nunca debiésemos hacer el máximo esfuerzo para que ese próximo acto eleccionario sea transparente y fidedigno, rechequeando aquellas instancias que merecen desconfianza e inseguridad, pues muchos votantes dudan a priori de sus resultados y credibilidad; siendo así, parecería que no se han agotado los análisis para transparentarlo al máximo.
Incluso algunos hablan de que ya el resultado estaría cocinado, quizás no o quizás sí y cualquiera sea éste no dejará conforme a una gran minoría.
En concreto y a la pregunta ¿hicimos los mejores esfuerzos hasta aquí para ofrecer una máxima confiabilidad en el resultado que la mayoría real elija para el futuro de la nación? Claramente estaríamos al debe.
José Manuel Caerols Silva
Colillas de cigarro y contaminación
Mucho hemos escuchado sobre el daño que produce el tabaco. Enfermedades pulmonares, cáncer de pulmón, enfermedades cardiovasculares, entre tantas otras. Este hábito tan dañino es la primera causa de muerte evitable en el mundo y no solo genera efectos en la salud, sino que también tiene un impacto importante en el medioambiente, ya que es el segundo residuo más grande a nivel mundial.
Según un artículo de la Universidad de Navarra, las colillas contienen miles de sustancias tóxicas que quedan en su filtro: nicotina, mercurio, plomo, arsénico, e incluso ácido cianhídrico, utilizado en las cámaras de gas durante el Holocausto. Estas producen un daño irreparable a nuestro hábitat, ya que tardan 12 años en degradarse y pueden contaminar hasta 500 litros de agua. De hecho, dos tercios de las colillas que se botan al suelo terminan en el mar.
Exponer esta situación no es solo para enfatizar que el consumo de tabaco es un hábito que hace daño no solo a la persona que fuma, sino que a millones de personas en el mundo y a nuestro medioambiente.
Una buena noticia es que en febrero de este año, en nuestro país se reforzó la Ley Chao Colillas, que prohíbe fumar en playas, ríos y lagos y botar colillas en espacios públicos, con un decreto que obliga a disponer contenedores y basureros para este fin.
El llamado es a tomar conciencia y a evitar esta práctica, que produce daños irreversibles en la salud y calidad de vida de las personas, pero también a nuestro planeta.
Guacolda Benavides, Clínica Universidad de los Andes
Déficit habitacional: un problema de género
Nuestro país vive una emergencia habitacional de gran magnitud. El último catastro de campamentos de Techo-Chile en 2021 señala que hay más de 81 mil familias viviendo en esta condición.
Esta emergencia no afecta igualmente a toda la población, las mujeres jefas de hogar constituyen la mayor proporción del déficit habitacional. Parte importante de ello se explica por el allegamiento: muchos hogares monoparentales liderados por mujeres que deben apoyarse habitacionalmente en sus familiares y, a menor nivel de ingresos del hogar allegado, es mayor la probabilidad de que presente jefatura femenina: así se intersectan la vulnerabilidad socioeconómica y habitacional. Tanto los campamentos como el hacinamiento replican esta tendencia.
Esto no se trata solo de construir viviendas, sino que estas deben cumplir con ser adecuadas en términos económicos, sociales, culturales y territoriales, y también desde el punto de vista de su acceso equitativo en términos de género.
Nuestra política debe reconocer este vínculo y reformular los criterios de selección de los actuales programas, priorizando aquellos hogares vulnerables con prevalencia de mujeres jefas de hogar.
Clemente Larraín, coordinador de estudios y políticas públicas, Déficit Cero/ Paz Zúñiga, coordinadora de investigaciones territoriales, Techo-Chile