Con un nivel de productividad científica que lo ubica dentro del 2% de los científicos más destacados a nivel mundial en su disciplina, el temuquense Bernabé Rivas Quiroz es un serio candidato a obtener este año el Premio Nacional de Ciencias Aplicadas y Tecnológicas, máximo reconocimiento que da el Estado a quienes con su obra han contribuido con excelencia al desarrollo del área científica.

Aunque su extensa trayectoria académica y científica la ha desarrollado en la Universidad de Concepción (UdeC), el doctor Rivas tiene sus raíces en Temuco, ciudad a la que sigue ligado por sus lazos familiares, sin olvidar además que fue en la capital de La Araucanía donde comenzó a nacer en él la curiosidad por el exigente mundo de la ciencia.

Sus estudios básicos los realizó en el Instituto Claret y la Escuela Santo Tomás y, más tarde, cursó las humanidades de aquellos años en el Liceo de Hombres (hoy Pablo Neruda), asegurando que sus profesores de aquel entonces influyeron en su vocación científica y en su interés por la química y la biología, llevándolo en el transcurso de los años a estar en el top mundial de los científicos con un registro de 460 papers WoS, con 6.801 citas, entre muchos otros logros, sin contar con su vasta trayectoria como académico, además de ocupar importantes cargos al interior de la UdeC y el haber presidido el Consejo Superior de Fondecyt, la Sociedad Chilena de Química e integrar la Comisión Nacional de Acreitación (CNA).

- ¿Cuándo comenzó a sentir que dedicaría su vida la ciencia?

- Yo creo que los profesores que tuve en el colegio de alguna manera me fueron motivando por la ciencia, la química y la biología. De ahí surgió mi motivación para estudiar una carrera como Bioquímica y seguí fortaleciendo esa motivación, lo que me llevó después a hacer un doctorado en Química y a realizar actividades postdoctorales en el extranjero. Por eso yo siempre digo que la raíz está ahí, en los profesores que uno tiene en el colegio.

- ¿Cómo recibe esta postulación al Premio Nacional de Ciencias Aplicadas y Tecnológicas?

- Para mí es una gran satisfacción y orgullo el estar nominado y haber sido presentado por la Universidad de Concepción para este importante premio. Uno entiende que a este premio postulan científicos con excelentes antecedentes y el jurado elige a quien es más representativo del premio. Por eso, para los que estamos en esto, la nominación ya es un orgullo, pensando en que lo hace la Universidad de Concepción, que es mi alma mater donde me he formado y he hecho toda mi carrera.

-¿Qué ha significado para usted el ser reconocido entre el 2% de científicos más relevantes a nivel mundial?

- Primero fue una sorpresa porque era un estudio del que yo no estaba informado. Yo, como la mayoría de los científicos de este país hacemos investigación, pero no estamos preocupados de lo que se está haciendo en otros lados desde el punto de vista del reconocimiento hacia el científico. Esto lo hace una universidad americana y entregó los resultados el año pasado y para mí fue una sorpresa y nuevamente una gran satisfacción porque es un orgullo el poder hacer ciencia en un país como el nuestro que tiene muy buenos científicos, pero sabemos las limitaciones que hay en cuanto a los recursos para hacer ciencia e investigación, además de hacerlo desde regiones. Así que me sentí muy contento al ser reconocido dentro de un universo de sobre 6 millones de investigadores.

- Hacer ciencia es nuestro país sigue siendo una tarea compleja por las limitaciones de recursos, ¿cree que esta situación pueda mejorar?

- El país ha estado invirtiendo más recursos desde el punto de vista nominal, pero en porcentaje no cambiamos del 0,36-0,34 del PIB y eso está muy por debajo de lo que hace cualquier país de la OCDE. La única manera de ir revirtiendo esta situación, es con mayores recursos aunque entendemos las limitaciones que tiene un país como el nuestro, con tantas necesidades. Por otro lado se ha ido incrementando fuertemente el número de investigadores en el país y obviamente se requieren más recursos; no es un problema de masa crítica sino que es un problema de recursos y de facilidades que se otorguen a las instituciones de educación superior, a los centros de investigación.

-¿Cómo le afectó la pandemia para su continuar con su trabajo científico?

- No ha sido fácil. Nos afectó en lo emocional, en cómo hacemos docencia, cómo hacemos investigación, el no poder entrar a nuestros laboratorios por mucho tiempo… Nosotros recién este año logramos entrar con todas las regulaciones, con esta normalidad entre comillas, por lo tanto ha sido todo un desafío (…) Quizás la ventaja que pudo haber tenido es que dentro de todo hubo algo más de tiempo para la reflexión, madurar ideas, preparar algunas iniciativas, escribir artículos que no había tenido tiempo de hacer y prepararse para lo que ha venido ahora; pero claramente han sido tiempos difíciles, no han sido fáciles para el desarrollo de la ciencia, y además la actividad más importante es la actividad experimental, estar en el laboratorio y el contacto con los estudiantes de pre y postgrado.

-¿Sigue siendo difícil hacer ciencia desde regiones?

- Ciencia de muy buen nivel, de excelencia, se puede hacer en cualquier parte del país. Hay investigadores buenos, pero yo creo que el problema son los recursos que se van concentrando principalmente en la Región Metropolitana, pero eso no quita que no haya investigación en otras regiones. Quizás donde más se noten las diferencias es en las regiones extremas por la distancia geográfica, pero en otras regiones como Biobío, Araucanía o Valparaíso, por nombrar algunas, hay investigación que se desarrolla al más alto nivel y no hay grandes diferencias. Finalmente lo que yo digo es que es un problema de recursos y de masa crítica que hay en regiones. El 70% de lo que se hace en el país, se hace en la Región Metropolitana, entonces ahí está la mayoría y concentra las instituciones de educación superior con investigadores.

- ¿Qué consejo podría entregarle a los futuros científicos, principalmente a quienes quieran hacer ciencia desde las regiones?

- Primero que nada, deben amar lo que hacen. Hacer investigación, ciencia, significa casi una forma de vida, lo que implica también muchos esfuerzos, sacrificios, pero sin duda todo se puede lograr aún estando en regiones y en un país como el nuestro, porque no es solo estar en regiones: Chile es un país que está alejado del mundo y hay que conectarse, porque uno no puede hacer ciencia aislado como país y menos como región. Por lo tanto yo creo que eso se supera con las convicciones que uno tenga, el esfuerzo, la constancia, perseverancia y, sobre todo, con redes de cooperación, tanto nacionales como internacionales ya que con ellas la investigación crece y se consolida, porque son fundamentales.

-¿Cuál es su momento actual tanto como académico y como científico?

- Actualmente sigo en actividades académicas con docencia en pre y postgrado y también en investigación a través de proyectos continuando con lo que ha sido mi motivación durante toda mi carrera que es la ciencia aplicada a mejorar el medioambiente y especialmente el agua, que es un elemento vital.

"Ciencia de muy buen nivel, de excelencia, se puede hacer en cualquier parte del país. Hay investigadores buenos, pero yo creo que el problema son los recursos que se van concentrando principalmente en la Región Metropolitana".

"Hacer investigación, ciencia, significa casi una forma de vida, lo que implica también muchos esfuerzos, sacrificios, pero sin duda todo se puede lograr aun estando en regiones y en un país como el nuestro".