Magallanes dio la gran sorpresa de la Copa Chile al clasificarse para la final del torneo tras superar en la eliminatoria a Huachipato, equipo al que venció por 1-0 en el partido de ida e igualar 1-1 ayer.

De esta forma la Academia se instaló como representante de la Primera B en la definición del torneo que da un cupo para la Copa Libertadores del próximo año. Sin embargo, para hacer efectivo ese beneficio los albicelestes deberán además de coronarse campeones subir a Primera División, lo que aún es una posibilidad latente ya que lideran la lucha por el ascenso a poco del final.

Por ahora la final de esta Copa Chile es una gran incertidumbre porque del otro enfrentamiento de semifinales no se ha disputado siquiera el partido de ida luego de que la Delegación Presidencial de Valparaíso impidiera el duelo de ayer entre Universidad de Chile y Unión Española.

Este enfrentamiento está lejos de resolverse pues hay amenaza de una pugna dirigencial luego de que los hispanos pidieran el mismo sábado, cuando se informó la suspensión, que se le otorgaran los puntos ya que el equipo local (la U) no había conseguido dónde jugar. Pero los azules se defendieron afirmando que hicieron todo lo posible por conseguir sede.

Éxito carabelero

Sin problemas y esperando a su rival, Magallanes celebró con todo su avance a la final en el Estadio Municipal de San Bernardo.

De igual a igual, como adelantando lo que podría ser su próxima temporada si logra en ascenso a Primera División, los carabeleros se plantaron con firmeza ante el Huachipato de Mario Salas, al que habían vencido en Talcahuano por la cuenta mínima.

En el primer tiempo ambos equipos se anularon en sus cuidados de un resultado que para los visitantes mantenía abierta la llave y para los locales significaba la clasificación.

El equipo acerero buscó más porque lo necesitaba para avanzar, pero fue bien anulado por los hombres de Nicolás Núñez.

En la segunda etapa los negriazules buscaron con más intensidad, pero igualmente fueron incapaces de conseguir el gol que igualara la serie.

Y a los 76 minutos llegó la apertura de la cuenta, pero para el cuadro local: Thomas Jones cedió una buena habilitación para Felipe Flores, quien aumentó a 2-0 el marcador global y prácticamente aseguró la clasificación albiceleste. El estadio explotó.

Reacción insuficiente

Recién entonces apareció el hambre de Huachipato, que se fue con todo contra el arco rival y a los 82 minutos igualó el partido gracias a un tanto de Nicolás Baeza.

La presión acerera fue total desde entonces: necesitaba una conquista más para igualar el global y forzar una definición a penales. Pero el segundo gol nunca llegó y fueron los hinchas y jugadores de la Academia quienes festejaron su paso a la final.

De esta forma repiten la actuación que consiguieron en la Copa Chile de 2011, cuando se enfrentaron en la final a Universidad Católica y perdieron en la definición desde los 12 pasos.

El próximo desafío de Magallanes es su duelo del jueves contra Deportes Copiapó por el torneo de Primera B: si gana alcanzará una ventaja de 4 puntos sobre Cobreloa con 6 por jugarse.

2-1 ganó Magallanes en el global contra Huachipato luego de vencer por 1-0 en Talcahuano y empatar 1-1 ayer en San Bernardo.

2011 jugó por última vez la Academia una final de Copa Chile. Ese año perdió contra la UC en la definición a penales.

El excampeón mundial de peso pesado Deontay Wilder volvió con furia al boxeo y su víctima fue el finlandés Robert Helenius, al que noqueó poco antes de que terminara el primer round para levantar su candidatura a una nueva disputa por el título de la categoría máxima.

Fue un triunfo con el que dejó atrás los fantasmas que lo hicieron retirarse temporalmente luego de dos derrotas seguidas ante el británico Tyson Fury, el segundo hace un año, en el que Wilder se inclinó en el undécimo asalto luego de haber mandado dos veces a la lona a su rival.

En su regreso de este fin de semana el estadounidense de 36 años no quiso dejar dudas de su recuperación y superioridad: se movió con prudencia ante el gigante nórdico antes de soltar el golpe de gracia con un derechazo, golpe que es considerado uno de los mejores del circuito mundial, para hacerlo desplomarse sin entender qué le había pasado.

Con esto Wilder elevó su récord a 43 triunfos (42 por nocaut), dos derrotas (ambas ante Fury) y un empate.

"Le tendí una trampa, le permití llegar y cuando llegó, ataqué. Fue una gran noche", afirmó Wilder para describir lo que ocurrió. Y así fue porque Helenius lo arrinconó con su enorme físico (pesa 10 kilos más que el estadounidense) y cuando estaba confiado recibió el gran golpe.

Y luego el triunfador habló acerca de quién podría ser su siguiente retador: "¿Quién será el próximo? Me apunto a lo que sea. Andy Ruiz, Oleksandr Usik o quien sea. Estoy de vuelta. La emoción ha vuelto a la división de los pesos pesados".

No nombró a Fury, su némesis, ya que éste en abril anunció su retiro luego de vencer en el estadio de Wembley a su compatriota Dillan Whyte por nocaut en el sexto round.

De esa forma abandonó los cuadriláteros invicto con 32 triunfos y un empate. Y se retiró como campeón de todas las asociaciones existentes.

Pero si bien parece difícil, los promotores de todo el mundo ya están pensando cómo hacer para que se produzca el Fury contra Wildet, capítulo 3.