De acuerdo al análisis que hizo el presidente del Consejo para la Transparencia, el abogado y profesor de Derecho de la Comunicación de la UC, Francisco Javier Leturia Infante, el polémico audio grabado por el diputado Miguel Mellado en la reunión con el Presidente Boric no sería un hecho constitutivo de delito y, por lo tanto, tampoco amerita un desaforo parlamentario.

Al ser consultado por El Austral explicó que "de acuerdo al art 161 A del Código Penal, este requiere que lo que se grabe y/o divulgue se trate de conversaciones de carácter privado. Una conversación entre autoridades sobre un tema público no veo que pueda cumplir con ese requisito, al contrario, es algo de carácter público y de gran interés público. Además, por eso los medios pudieron reproducir sin problemas su contenido y hasta ahora no ha habido ninguna querella contra los medios de comunicación. Ello no significa que la conducta haya sido positiva. Pero, no todas las cosas que son inadecuadas son ilegales, y muchas menos son las que se castigan con cárcel. Si consideramos la jurisprudencia sobre el 161 A, es decir, de acuerdo a la interpretación que han hecho los propios tribunales, y con la información que hasta ahora tenemos, no se ve que se cumplan los requisitos para que sea delito. Pero son los tribunales los que tienen la última palabra en eso", consignó.

"Estoy aquí dando la cara y voy a asumir las consecuencias (...) no voy a renunciar porque yo me debo a La Araucanía, una región que defiendo con mucha pasión para que se acabe el terrorismo".

Con estas palabras asumió sus actos en conferencia de prensa ofrecida ayer en el Congreso el diputado Miguel Mellado (RN), en el marco del polémico audio que grabó, sin consentimiento del Ejecutivo, en la reunión que sostuvo el Presidente Gabriel Boric con las bancadas de la Macrozona Sur el pasado martes.

Razones para grabar

En la oportunidad, y antes de la rueda de preguntas, Mellado explicó lo sucedido y las razones que tuvo para grabar. "No estuve presente cuando dicen que dieron las instrucciones de no grabar, raro, pero la dieron (...) grabé los diez minutos finales de una reunión que duró tres horas, eran las conclusiones y compromisos del Presidente con la Macrozona Sur y me pareció relevante grabar para recordar (...) y cobrar en seis meses más. Y si lo compartí fue de buena fe porque no contenía información distinta a la ya expresada por diversas autoridades a la salida de la reunión".

CONFESIÓN Y SECUELAS

Luego, al ser consultado por la consecuencias, las que van desde un eventual desaforo hasta sanciones político éticas y también de carácter penal, dadas las denuncias ya ingresadas, el parlamentario aseveró que "estoy aquí dando la cara (...) y asumiré las consecuencias porque soy responsable", recordando en todo momento su lucha por La Araucanía.

Las eventuales consecuencias a las que alude son políticas y judiciales, las que podrían venir de su partido que es Renovación Nacional, de la bancada que integra o bien de la Cámara. "Voy a pedir al Presidente de la Cámara que pase mis antecedentes a la Comisión de Ética, porque es importante autodenunciarme y además voy a defenderme de las denuncias judiciales", recalcó, agregando que la grabación que compartió en su opinión "no es un delito".

También tuvo que salir al paso de sus primeras declaraciones y del tiempo transcurrido previo a su confesión. En este contexto aclaró que no se contradijo ni mintió, sino que "fui impreciso", y que si habló fue "porque estaban enlodando a parlamentarios de La Araucanía que quiero mucho".

Del quiebre de las confianzas tras lo sucedido también admitió que es un efecto real, pero que en la práctica "no se ha dañado más de lo que ya estaba dañado" y que "son recuperables".

En el marco de su visita a la Región, ayer se le consultó al Presidente Gabriel Boric por las declaraciones del diputado Miguel Mellado (ver nota principal), señalando que en su opinión cada una de las intervenciones del diputado "se contradicen" y que "acá no hay un 38%: tenemos que ser una unidad los chilenos y chilenas en contra de la violencia", declaró Boric para explicar que la actitud el diputado, la cual calificó de "tremendamente irresponsable, no afectará mi convicción de seguir trabajando para que saquemos esto adelante, independiente de las diferencias políticas".

El mandatario también dejó en claro que es la justicia la que debe dirimir si lo ocurrido es o no un delito. "Como funcionarios públicos nuestra obligación era presentar la denuncia y en lo personal no me voy a querellar contra el diputado (Mellado), no vamos a empezar una persecución personal. Será la justicia la que determine los pasos a seguir", determinó el Presidente Gabriel Boric.