Salud mental, un área sensible en proceso de cambios para Araucanía Sur
De acuerdo a estadísticas del Servicio de Salud, cerca del 20% de los 700 mil usuarios y usuarias Fonasa de la Región presenta o ha experimentado algún trastorno de salud mental. Bajo esta lógica, tiene sentido que la autoridad y el sector público estén hoy en medio de un proceso de transformaciones, que implica un resideño del modelo organizacional, acompañado de un plan de inversiones, que entre otros aspectos considera la creación de centros diurnos en al menos cinco comunas. Mientras las familias usuarias ruegan por nuevos protocolos e infraestructura, mientras; la psiquiatría propone fortalecer el modelo de atención comunitario.
Hace varias semanas la salud mental, como tema de conversación, ha se instalado en las calles de Temuco. Familiares de pacientes psiquiátricos comenzaron a exponer sus experiencias y compartirlas con transeúntes en la Plaza Aníbal Pinto y en las afueras del Hospital Hernán Henríquez Aravena. ¿El objetivo? Denunciar disconformidad con el modelo de atención e impulsar mejoras al sistema.
Es lo que plantea el Movimiento Salud Mental Digna, una organización ciudadana que acaba de adquirir su personalidad jurídica y que, poco a poco, ha pulido un petitorio que hoy encuentra ojos y oídos en diversas instancias, porque, al final toda polémica lo que busca es generar cambios, para mejor. Y es lo que ha sucedido en este caso. Las conversaciones han dado frutos y hoy se vislumbran transformaciones, sobre todo en materia de rediseño organizacional, inversión y un particular compromiso con uno de los eslabones que falta en la cadena de respuesta a los usuarios del área pública: los hospitales diurnos.
El director del Servicio de Salud Araucanía Sur (SSAS), el psicólogo Vladimir Yáñez, lo corrobora y destaca. "Estamos desafiados permanentemente en salud pública. Digo eso porque efectivamente estamos en un proceso de revisión permanente de lo que significa la forma en que desarrollamos la atención. Particularmente, estamos en un proceso de cambio de cómo se percibe y cómo se debe trabajar la salud mental en la provincia, que es una prioridad del Gobierno".
A su juicio, lo primero que hay que entender para tener una visión completa de este tema, es que la salud mental es mucho más que psiquiatría. Prueba de ello es que actualmente la red Araucanía Sur cuenta con 41 psiquiatras de adultos, 18 infanto-juveniles y 111 psicólogos, quienes integran un modelo instalado en toda la provincia, y con distintas estrategias de trabajo y abordaje.
"Como psicólogo entiendo la relevancia de la salud mental, no sólo desde lo patológico, sino desde lo preventivo y desde la promoción, porque suele hablarse de la salud mental desde el proceso de recuperación de alguna condición o desde el tratamiento, sin embargo, es mucho más amplia. Para empezar, está presente en todo el ciclo vital de una persona, nos acompaña toda la vida y por ello el aspecto preventivo es relevante. No debemos de medicalizar todo", acota.
Con esta idea concuerda la psiquiatra infanto-juvenil y académica de la UFRO, Christianne Zulic, quien opina que esta área de la salud debe dejar de mirarse desde la falencia y empezar a observarse desde la psicología positiva. "De hecho, si vemos la inversión de los recursos, muchas veces el foco está puesto al final de la pirámide. Por ejemplo, para los chicos infractores de ley, con múltiples diagnósticos, asociados con traumas y alto consumo, allí hay un montón de recursos destinados y, por el contrario, hay muy poco destinado a la prevención y promoción".
En la actualidad, explica el director del SSAS, de los 700 mil usuarios y usuarias Fonasa de La Araucanía existe una prevalencia del 20% en cuanto a personas que experimentan o han experimentado trastornos de salud mental, situación que solo viene a reforzar el compromiso del Gobierno con esta prioridad, la cual se traduce hoy en una serie de compromisos que responden a las demandas de los pacientes, familiares, profesionales y los