Si tuviéramos que definir cuáles fueron los alcances y resultados reales de lo que fue el 18 de octubre del 2019, podemos estar muy de acuerdo en su mayoría que los números se van a rojo y claramente tenemos muchos más aspectos negativos que positivos de esta fecha. La culpa, por cierto, es en parte de todos nosotros quienes habitamos esta hermosa tierra, que ni por cultura hemos sido capaces de trasmitir a las generaciones presentes los aspectos valóricos más trascendentales para poder convivir en armonía, como el de respetar al que piensa distinto, respetándolo en su pensamiento y en su espacio de desarrollo.

Pero mucho más lapidario es el diagnóstico hacia nuestras autoridades nacionales, quienes nos han llevado como país a la debacle moral y valórica, en la que aún estamos hundidos. Porque evidentemente ellos son los que marcan el surco para los avances integrales de la nación. Por lo tanto, no hay nada que celebrar, sólo lamentar.

En ocasiones, ya sea por lectura disciplinaria, por cultura general, por accidente o definitivamente por estudio sistemático de las escrituras, hemos escuchado el lamento de Jesús sobre Jerusalén, y es conmovedor el relato del evangelista Mateo, quien en su libro relata este momento en las propias palabras de Jesús: "¡Jerusalén, que matas a los profetas, y apedreas a los que te son enviados! ¡Cuántas veces quise juntar a tus hijos, como la gallina junta sus polluelos debajo de las alas, y no quisiste!". Tristemente, hay quienes solamente suelen quedarse con esas portentosas palabras de Jesús, sin embargo, si comenzamos a leer este capítulo 23 de Mateo desde el inicio, nos damos cuenta de que Jesús esta enrostrando públicamente a quienes justamente deberían ser los que guiarían al pueblo hacia una búsqueda genuina de Dios. Y es esa la razón por la cual nos encontramos en el mensaje que precede su grito de angustia diciéndole al pueblo: "Así que, todo lo que os digan que guardéis, guardadlo y hacedlo; más no hagáis conforme a sus obras, porque dicen, y no hacen. Porque atan cargas pesadas y difíciles de llevar, y las ponen sobre los hombros de los hombres; pero ellos ni con un dedo quieren moverlas".

Ahora, lo más relevante de esta descripción radica en el hecho de que quienes son puestos para poder conducir los destinos de una comunidad, no sólo tienen el alto honor del cargo, sino que más estrictamente, tienen la responsabilidad de orientar a sus dirigidos hacia la realización plena de la comisión encomendada. Y esto Dios lo demandará personalmente a todos, sean civiles, políticos, militares o eclesiásticos.

Pastor presbítero Pablo Pinto Salamanca,

Consejo Regional de Pastores Evangélicos de La Araucanía

El próximo año se cumplirán dos décadas desde que se estableció el régimen de las Garantías Explícitas en Salud (GES) por parte del Estado, plan a través del cual se otorgó un conjunto de beneficios garantizados en plazos y prestaciones para diversas enfermedades, como el cáncer cervicouterino y el de mama, tanto para pacientes de Isapres como Fonasa. El objetivo de la iniciativa fue asegurar el acceso, oportunidad, protección financiera y calidad del diagnóstico y posterior tratamiento de las patologías que fueron sumándose al sistema.

En el caso del cáncer de mama, que tiene a octubre como el mes destinado a la concientización de esta enfermedad, se cubre el diagnóstico después de la sospecha, el tratamiento y seguimiento de esta enfermedad, mientras que en cáncer cervicouterino se incluye también el tamizaje, es decir, las pruebas de detección de la patología.

Sin embargo, un reciente boletín de Faro UDD, en colaboración con el Centro de Políticas Públicas e Innovación en Salud de la Universidad del Desarrollo, dio a conocer que las listas de espera asociadas a estos dos cánceres presentan un aumento en La Araucanía.

Las cifras son preocupantes considerando que en el 2019 el cáncer de mama se transformó en la principal causa de muerte en mujeres a nivel nacional, con un 12,5% de los fallecimientos, resaltando la importancia de su diagnóstico oportuno.

Es relevante hacer un llamado a las mujeres a cumplir con los exámenes preventivos por la lentitud que está teniendo la atención, pero también porque pese a todas las campañas realizadas sigue existiendo desconocimiento sobre la utilidad o necesidad de realizárselos para evitar mayores consecuencias.