La ministra del Trabajo y Previsión Social, Jeannette Jara, reafirmó ayer sus polémicos dichos del miércoles, cuando en una actividad protagonizó un acalorado debate con el expresidente de la Sofofa, Bernardo Larraín Matte, a quien le dijo que "si realmente quieren que haya inclusión, paguen mejor, respeten más los derechos de las personas. Ese es el rol, también, de los empresarios".

Ayer defendió su punto de vista y ante la respuesta del empresariado remarcó que "los datos son objetivos y en Chile la gente gana muy poco".

"Sin duda, el nivel de remuneración es tan bajo, tan pegado al sueldo mínimo, que es algo que hay que asumir y ponerse de acuerdo. No puede ser que se resista que exista una reforma tributaria en el país, se resista una reforma de pensiones en el país y, además, sigamos teniendo salarios tan bajos", añadió.

Según la secretaria de Estado, "de alguna manera la inclusión, el crecimiento del país y el desarrollo, tiene que llegarle a todos".

"Yo diría que lo que menos contribuye en llegar a un buen escenario es pagar tan poco. No tratemos de simplificar los temas, si esto tiene varios elementos en el país. Lo importante es que hay que hacerse cargo de la informalidad, y para eso es súper bueno el debate, porque la Reforma Previsional lo que hace es promover la formalidad", sentenció.

La UDI CRITICA

Desde el Congreso, y bajo el debate de las 40 horas laborales semanales, el senador de la UDI Iván Moreira criticó las palabras de la ministra Jara.

"Las empresas y las Pymes no pueden ser obligadas a contratar si no tienen las condiciones para asegurar estabilidad en el empleo. El Gobierno no puede exigir a los empresarios y las Pymes si no ha hecho su propia parte, que es promover la inversión necesaria para que haya más empleos y mejores sueldos", señaló a radio Bío-Bío.

En Emol, el presidente de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC) , Ricardo Mewes, dijo que "lo que Chile necesita para tener más movilidad social, más oportunidades de empleo formal y mejores remuneraciones, es volver a crecer. Y eso requiere de una agenda clara y con plazos definidos, en que todos estén comprometidos".

Añadió que "a pesar de que la economía ha estado estancada, las empresas se están adaptando a los mayores costos asociados a la jornada de 40 horas, el alza del salario mínimo y al eventual aumento de las cotizaciones".

En el mismo medio, la presidenta de la Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa), Rosario Navarro, dijo que "cuando se emplaza apelando a cierta desconexión del empresariado, llamamos a sostener una discusión con altura y en base a evidencia: solo el 21,8% de los trabajadores dependientes formales del sector privado y que trabajan jornada completa, reciben hoy el salario mínimo, cifra que cae al 13,6% en las empresas grandes (...) Por lo tanto, hay un compromiso concreto de las empresas por avanzar en mejorar las condiciones de los trabajadores y las relaciones".

En Radio Cooperativa, el exsubsecretario de Hacienda, Alejandro Micco, declaró que es "de perogrullo" señalar que "si la economía no crece, los salarios no crecen", y advirtió que "mirado desde la perspectiva de cuánto ayuda hoy a una buena negociación de la reforma previsional, uno diría que no fueron las mejores palabras".