Gratuidad en educación
Tras su puesta en marcha en 2016, miles de estudiantes que pertenecen al 60% de los hogares con los menores ingresos del país han podido acceder a la gratuidad, beneficio que cubre la matrícula y arancel durante el período que dure la carrera. Medir la influencia de esta política pública motivó al Doctorado en Educación de la Universidad de Tarapacá a realizar un estudio que ahondó en cómo la implementación de la gratuidad cambió el comportamiento de los estudiantes chilenos.
Los resultados obtenidos son interesantes y nos muestran que los jóvenes de bajos ingresos tendieron a postular a programas más costosos que antes de la existencia de este mecanismo de financiamiento. Además, no se encontraron estudiantes que postularan a universidades de mayor selectividad o a carreras más largas después del 2016. Del mismo modo se ratificó que, aun cuando los alumnos de los primeros seis deciles de ingresos familiares tienen la posibilidad de estudiar de manera gratuita, siguen necesitando alcanzar cierto puntaje para entrar a las universidades y carreras más selectivas.
Realizar investigaciones de este tipo es relevante, porque permite evaluar el impacto y consecuencias de una política pública que repercute ampliamente, tanto en términos de beneficiarios como de gasto público. Cabe señalar, en este sentido, que el gasto público en educación superior destinado a financiarla superó el 60% en 2023.
Se torna necesario estudiar si es pertinente que la gratuidad se entregue a estudiantes que concurren a instituciones privadas dado que ello consolida el modelo de subsidiariedad y perjudica el desarrollo de las instituciones públicas y estatales.
Óscar Espinoza, U. de Tarapacá
Candidatos
¿Cómo es posible que existan personas que se sienten con el derecho a ser candidatos, pero no cumplen con el deber más básico, que es pagar la pensión alimenticia a sus hijos?
¿Dónde está la fiscalización de los partidos políticos? ¿Realmente las instituciones partidistas realizan un filtro antes de aprobar precandidaturas?
Rubén Álvarez
Préstamo previsional
La última propuesta previsional entregada por el Gobierno, considera un préstamo al Estado de un 2% de la cotización adicional, para financiar el bono de 0,1 UF por año cotizado, con un tope de 30 años o de 3 UF. El préstamo considera una rentabilidad de un 2% real anual, y se devuelve cuando la persona se pensiona.
Varios son los argumentos que muestran que la propuesta es errada. En primer lugar existe un perjuicio al cotizante, pues la rentabilidad ofrecida es bastante menor a la que puede obtener en el mercado de capitales a largo plazo. En segundo lugar, existe un alto riesgo de que el Estado no pueda cumplir el compromiso de pago futuro. Por último, y lo más complejo, es que se entrega el derecho de propiedad y de herencia sobre ese préstamo, algo tan inherente en los trabajadores actualmente.
El mejor destino de la cotización adicional es que vaya a capitalización individual. El Estado no puede meter su mano al bolsillo de las personas.
Eduardo Jerez Sanhueza
Pymes e Impuesto a la Renta
En un escenario de desaceleración económica y el impulso de medidas que incrementan los costos a las micro, pequeñas y medianas empresas (Pymes), como la Ley de las 40 horas, el salario mínimo de 500 mil pesos, entre otros, no queda más que celebrar la disposición del ministro de Hacienda a evitar que a este segmento de compañías se le aplique una tasa de 25% del Impuesto de Primera Categoría a partir del 2025, aumentando considerablemente la carga tributaria actual que corresponde a un 12,5%.
Las Pymes, sus asesores financieros y tributarios, esperan que el próximo proyecto de cambios a la Ley de Impuesto a la Renta, cuente con apoyo transversal y una tramitación ágil.
No hay que olvidar que este segmento representa casi el 78% del total de las compañías en Chile y emplea a más del 43% de los trabajadores, según últimos datos del Servicio de Impuestos Internos, siendo parte fundamental del engranaje económico del país.
Felipe Gormaz