Saavedra: funcionario acusa despido por no apoyar al candidato del alcalde saliente
MUNICIPALIDAD. El jefe comunal desmiente al exdelegado de Puerto Domínguez y aclara que "perdió mi confianza".
El exdelegado municipal de Puerto Domínguez, Manuel Llancapán, quien había asumido hace tres meses, denunció "despido injustificado por razones políticas" de carácter electoral de parte del alcalde de Saavedra, Juan Paillafil (Ind).
Así terminó la relación laboral entre ambas partes, habiendo sido el jefe comunal quien le otorgó la plaza laboral en su administración hace ya una década.
El exdelegado acusa que la no renovación de su contrato a honorarios fue por "no querer apoyar" al candidato de la gestión saliente: Mario Llancaleo, el cual fue elegido a través de una consulta ciudadana que realizó Paillafil.
Los hechos se hicieron públicos el pasado lunes en los puntos varios del último Concejo Municipal de Saavedra, ocasión en donde los concejales Enrri Bañares (Ind-PPD) y Juan Pavez (DC) ofrecieron disculpas al exdelegado en nombre de la institucionalidad, junto con lamentar y criticar lo ocurrido.
ACUSACIÓN
El Austral contactó al exdelegado aludido quien corroboró los hechos junto con anunciar que seguirá acciones legales en el marco de la Ley Karin.
"Cuando el alcalde me ofreció el trabajo (traslado desde el municipio a la delegación de Puerto Domínguez) yo nunca le dije que haría campaña política por nadie. Mi compromiso siempre fue trabajar por la gente. Sin embargo, empecé a recibir correos y mensajes de personas de confianza del alcalde para que me uniera al comando de Llancaleo. Y como no quise hacerlo vino la negatividad del alcalde, quien pasó por alto el compromiso inicial de que mi trabajo sería hasta diciembre".
Añadió que "como vecino yo estaba haciendo un buen trabajo por mi territorio, por eso esta desvinculación sin previo aviso me dolió y me dio rabia. Fue un despido injustificado que incluyó manipulación y presiones políticas. Ahora me quedé sin nada. Después del horario laboral uno debería ser libre de pensar, opinar y apoyar a quien uno quiera".
"Esta desvinculación sin previo aviso me dolió y me dio rabia. Fue un despido injustificado que incluyó manipulación y presiones políticas. Después del horario laboral uno debería ser libre de pensar, opinar y apoyar (...)".
Manuel Llancapán,, exdelegado Puerto Domínguez