Clave era el partido de ayer para Deportes Temuco. Y pese a que lo empezó ganando, lo enredó. En esa maraña de dudas y de confusiones se empantanó y sufrió una dolorosa derrota por 1-2 ante Barnechea.

El revés caló hondo porque resintió gravemente sus chances de llegar a la liguilla del Campeonato de Primera B. Sus opciones de clasificación ahora son más matemáticas que reales.

La caída lo dejó en el duodécimo lugar de la tabla de posiciones del torneo, con 33 puntos, y lo dejó a tres cuerpos de la zona de postemporada. Si bien la diferencia no es irremontable, con sólo dos partidos por delante y no dependiendo de sí mismo, el panorama se ve complejo. Además Santiago Morning podría alejarlo más de la clasificación si hoy derrota a Recoleta.

Con gol tempranero

El escenario albiverde se complicó ayer luego de un inicio auspicioso. En el Estadio Municipal de Lo Barnechea, la visita golpeó cuando aún no se cumplía el minuto de juego. A los 54 segundos, Luis Acevedo recibió un preciso pase largo de Camilo Núñez y con un derechazo cruzado batió al arquero Cristián Campestrini.

La ilusión inicial se empezó a apagar cuando Barnechea emparejó la cuenta a los 25 minutos con un penal servido por Gonzalo Tapia, tras falta de Agustín Peñailillo sobre Boris Sagredo.

El golpe se sintió y el Pije se vio superado en el juego. Defendiendo muy atrás y con poca batalla en el mediocampo (Camilo Núñez era el único volante con más marca), cedió terreno y sólo volvió a preocupar al término del primer tiempo con un remate de Julio Castro.

A la vuelta de camarines, el panorama no cambió en nada y el riesgo de quedar en desventaja seguía. La bomba de tiempo estalló rápido (51') cuando Matías Gallegos capitalizó un buen centro de Cristián Pardo y envió el balón a las redes.

Recién ahí despertó Deportes Temuco. Ya en desventaja y mirando la liguilla cada vez más de lejos, trató de buscar fútbol con el ingreso de Byron Bustamante y más presencia física con la entrada de Diego Sánchez.

Los cambios ayudaron a cargar el juego en el lado del local, pero no entregaron la claridad que se esperaba. Más con empuje que con luces, tuvo un par de chances a través de Julio Castro. Ninguna de ellas vulneró la resistencia de Campestrini y el triunfo que tanto se necesitaba, se escapó definitivamente.

"Estamos tristes y súper golpeados. Hicimos todo lo posible. Se nos escaparon tres opciones abajo del arco y perdimos un partido que no debíamos perder", manifestó Víctor González, defensa de Deportes Temuco.

Tras la derrota de ayer, González y sus compañeros tendrán que enfrentar como locales a Recoleta.

El encuentro, que aún no ha sido programado por la Anfp, será el penúltimo que disputarán en la fase regular del certamen.