Documental de Temuco busca exponer las heridas de las adopciones ilegales en Chile
"HUELLAS DE AUSENCIA". Dirigido por el periodista Santiago Rodríguez.
Durante décadas, y con cálculos aproximados, más de 20 mil niñas y niños chilenos fueron separados de sus familias bajo dudosos métodos, siendo enviados al extranjero en procesos de adopción ilegal que marcaron a generaciones enteras. Y es así como investigaciones recientes han identificado al menos 18 países a los que fueron llevados menores desde Chile, contando una cifra que puede llegar a superar los 20 mil casos.
En este contexto, desde Temuco nace el proyecto audiovisual "Huellas de Ausencia", un documental testimonial ganador de los Fondos de Desarrollo Regional, FNDR 2024, y que fue postulado por la organización social "Solidaridad Temuco". El material busca mostrar impactantes testimonios sobre este oscuro capítulo de la historia chilena, abordando las profundas desigualdades sociales, étnicas y de género, que llevaron a cientos de familias a perder a sus hijos en la Región de La Araucanía.
Bajo la dirección del conocido periodista regional Santiago Rodríguez; y desarrollado por Pointaparte Producciones, tiene como objetivo principal visibilizar las experiencias emocionales de las víctimas de adopciones ilegales en Temuco durante los 60's; y, sobre todo, en las décadas de los 70's y 80's. A través de testimonios de mujeres y familias afectadas "Huellas de Ausencia" busca sensibilizar al público sobre las injusticias sufridas y promover un diálogo necesario sobre la justicia, la verdad y la reparación.
Al respecto, el consejero regional Leonardo Astete destacó la importancia del proyecto para colaborar al esclarecimiento de lo que realmente ocurrió con las adopciones ilegales y el paradero de estos niños. "Es un tema muy sensible y que requiere reparación, justicia, pero también que la ciudadanía conozca la problemática y cómo esto ha afectado la calidad de vida de muchas mujeres", enfatizó.
El presidente de la agrupación Solidaridad Temuco, Álex Manosalva, dijo que como organización han abrazado este proyecto para dar a conocer esta triste realidad. "Hay familias completas que no cuentan con uno de sus integrantes por una acción ilegal que involucró civiles y funcionarios de Estado y es necesario evidenciar esto para que nunca más ocurra y ver si alguien puede aportar información para encontrar a estos niños, que hoy ya son adultos, devolviéndoles así la paz a estas madres, hermanos y familias".
El periodista encargado del proyecto, Santiago Rodríguez, relevó el hecho de que en Chile siempre se ha escuchado hablar de este tema, pero pocos saben que fueron más de 20 mil niños y niñas en este país. "La adopción ilegal no solo separó familias, sino que también reflejó profundas desigualdades que afectaron con mayor fuerza a mujeres vulnerables por su etnia, clase social o hasta por su condición familiar. Y este proyecto audiovisual pretende analizar cómo estas dinámicas de género y poder, contribuyeron a exponer a mujeres a un sistema que en muchos casos las despojó de hijos sin su consentimiento", reflexionó.
Un llamado a la memoria y la reparación
"Huellas de Ausencia" no solo busca ser un proyecto audiovisual; es también una invitación a reflexionar como sociedad sobre los errores del pasado y la importancia de garantizar que estos hechos no se repitan. Por tanto, se busca generar conciencia, promover el diálogo y abogar por medidas concretas que permitan justicia y reparación para los afectados.
Durante el desarrollo del documental, se ha puesto especial énfasis en la contención emocional de las personas entrevistadas, un aspecto clave que ha sido abordado con profesionalismo y sensibilidad por la psicóloga y Magíster en Psicología Jurídica y Forense, Fabiola Haro.
Finalmente, cabe destacar que el proyecto cuenta con la activa participación y acompañamiento de la agrupación nacional Hijos y Madres del Silencio, que ha trabajado incansablemente para brindar apoyo a las mujeres víctimas de adopciones ilegales y facilitar los reencuentros familiares, un proceso particularmente complejo, debido al cambio de identidad impuesto a los hijos adoptados incluso antes del momento de su adopción.
"Es un tema muy sensible y que requiere reparación, justicia, pero también que la ciudadanía conozca la problemática y cómo esto ha afectado la calidad de vida de muchas mujeres".
Leonardo Astete,, consejero regional
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