Andrea Arias Vega

Los consejeros regionales reelectos de La Araucanía, en términos generales, esperan poder trabajar con el nuevo gobernador electo "sin miramientos políticos ni prejuicios" de ningún tipo. Algunos están optimistas, ansiosos y expectantes, mientras que otros, de entrada, plantean que sus expectativas son nulas.

Sin embargo, en el marco de la intensa y polémica campaña que hubo, todos esperan arrancar en enero con una conversación honesta y transparente que apunte a una gestión en equipo que continúe lo que se ha hecho bien y perfeccione lo que sea necesario en beneficio de la gente de La Araucanía.

Reacciones

El único core reelecto sin apoyo político, Miguel Ángel Contreras, es de los que está expectante. "No estoy preocupado, al contrario, estoy ansioso porque no tengo color político y el nuevo gobernador viene con la misma postura. En elecciones se dicen un montón de cosas, pero de enero para adelante tenemos que trabajar con todos los alcaldes. Sabemos que Saffirio tiene experiencia en la gestión pública así es que la expectiva es buena".

La core Ana María Soto (PPD) también valora "la trayectoria, capacidad y experiencia" que tiene el nuevo gobernador electo "para enfrentar este desafío. Hoy la ciudadanía se ha manifestado y estoy convencida que espera se reinicie con la mayor celeridad los grandes temas. Esperamos trabajar en equipo para avanzar con las necesidades y soluciones que tanto apremian a los habitantes de Región".

La core Mónica Rodríguez (DC) se suma manifestando "su esperanza de poder sacar adelante los compromisos con la Región. Hay que destacar las cosas importantes y mejorarlas, pero también incorporar las ideas vanguardistas del nuevo gobernador. Hay que dialogar para dejar a un lado los asuntos personales y las miradas de desprestigio".

El core Essio Guidotti (PPD) reconoce que no conoce a Saffirio, pero que de todas maneras "le deseo éxito y comparto que se investigue el traspaso de recursos a las fundaciones. Sin embargo, estoy preocupado porque al fragor de la campaña en un debate declaró que había una especie de repartija entre los cores. Nos debemos una conversación porque al menos yo que llevo tres años no manejo ninguna cuota".

Entre los cores de Chile Vamos, están los que no tienen expectativa alguna con la llegada del nuevo gobernador, como es el caso de Gilda Mendoza (RN). "No tengo expectativas, pero la gente lo eligió y hay que respetar la democracia. No tengo expectativas porque lo conozco desde hace bastante rato y ha sido dubitativo en su comportamiento político. Nunca ha estado muy claro lo que quiere para la Región, aparte de tratarnos a todos los cores de que somos ladrones o corruptos. No puedo tener otra opinión al día siguiente de haber perdido la elección con una persona que estimo mucho. Me ha escrito mucha gente de diversos lugares porque están con una tremenda pena y se sienten desprotegidos".

Distinta opinión maneja el core Hugo Monsalve, quien también es de Chile Vamos. "La gente lo eligió y la democracia se respeta, solamente espero seguir trabajando sin miramientos políticos y por el progreso de nuestra Región".

Por su parte el core Eduardo Hernández (RN) agradeció al gobernador Rivas "por todo lo realizado en materia de reactivación económica y la inversión histórica en seguridad ciudadana", añadiendo que "junto con felicitar al nuevo gobernador estamos a disposición de continuar trabajando fuertemente por las 32 comunas, sin prejuicios ni miramientos, formando un gran equipo junto a los dirigentes, vecinos, municipios y las diversas instituciones y actores que se vinculan con el Gobierno Regional".

Asimismo, el core Rodrigo Pacheco (UDI) planteó que "tenemos expectativas de seguir trabajando en equipo para fortalecer aspectos relevantes como la seguridad, el apoyo a los emprendedores y el trabajo con los alcaldes de manera transversal. Espero que Saffirio asuma esa responsabilidad porque nos preocupa qué va a pasar con todos los programas de seguridad y emprendimiento que veníamos trabajando. Si bien ganó el candidato de la izquierda, las problemáticas de la Región no tienen color político. Estamos a disposición de sentarnos a conversar con él y buscar lo que es más beneficioso para La Araucanía".

"No tengo expectativas, pero la gente lo eligió y hay que respetar la democracia. No está claro lo que quiere, aparte de tratarnos a todos los cores de ladrones o corruptos".

Gilda Mendoza (RN),, core reelecta

"No estoy preocupado, al contrario, estoy ansioso porque no tengo color político y el nuevo gobernador viene con la misma postura". Miguel Ángel Contreras (Ind),

core reelecto

René Saffirio ganó las elecciones para Gobernador Regional de La Araucanía con una diferencia de apenas 22.055 votos. En esta ajustada contienda, la provincia de Cautín, con su mayor concentración demográfica, fue una variable crítica para el resultado final. Mientras que en Malleco los resultados fueron ampliamente favorables a Luciano Rivas (59,36% contra 40,64%), en Cautín la situación fue opuesta, con Saffirio liderando con un 54,63% frente a un 45,37%.

Para explicar este resultado, cualquier interpretación debe ser considerada una hipótesis que contemple la significativa diferencia en las dinámicas electorales entre las dos provincias de la región. Desde esta perspectiva, es posible responder la pregunta ¿por qué ganó René Saffirio? a partir de varias variables explicativas.

El voto castigo como clave interpretativa: Autores como Anthony Downs ("An Economic Theory of Democracy", 1957), Albert Hirschman ("Exit, Voice, and Loyalty", 1970) y Pippa Norris ("Critical Citizens: Global Support for Democratic Governance", 1999) han abordado fenómenos como el voto castigo. Este comportamiento electoral se refiere a la tendencia de los votantes a manifestar su descontento contra quienes detentan el poder, ya sea votando por la oposición o absteniéndose de participar. Dicho fenómeno suele surgir en contextos de crisis económica, corrupción, mala gestión gubernamental o insatisfacción generalizada.

En este caso, la elección en La Araucanía resulta peculiar porque, a pesar de ser una región donde la derecha política ha mantenido hegemonía en procesos electorales recientes, y donde Luciano Rivas era el único gobernador electo de oposición en Chile, finalmente perdió la reelección. Siguiendo la lógica del voto castigo, podemos interpretar que el descontento con la gestión de la Gobernación Regional pesó más en esta ocasión que el descontento con el Gobierno Central.

La diferencia entre Cautín y Malleco: el voto castigo a Luciano Rivas se concentró principalmente en la provincia de Cautín, donde han tenido mayor resonancia los casos de corrupción actualmente investigados. Por el contrario, en Malleco, donde los problemas de violencia son más recurrentes, la ciudadanía parece haber responsabilizado principalmente al Gobierno Central. Esto explica por qué un candidato opositor al gobierno central, como Rivas, tuvo mayor respaldo en esta provincia, incluso si su gestión fue evaluada negativamente en otros aspectos.

El peso de un candidato fuerte: René Saffirio contaba con una sólida trayectoria como alcalde y diputado, con votaciones históricamente altas y una imagen positiva transversal entre distintos sectores políticos. En esta elección, la gran incógnita era si su capital político se mantendría vigente y si sería suficiente para derrotar a un gobernador en ejercicio, algo especialmente desafiante en un escenario donde el ser oposición y a la vez gobernador constituía una ventaja inicial.

El resultado fue claro: el capital político de Saffirio, particularmente en Cautín, junto con el voto castigo hacia Rivas, resultaron factores decisivos. Estos elementos nos permiten comprender la dinámica electoral que definió esta elección y que reafirma la complejidad de las relaciones entre política local, problemas regionales y el descontento ciudadano.